¿Quieres una nueva cámara y no te decides cuál comprar?
Hay tantas opciones en el mercado que se vuelve confuso decidir qué marca o qué tipo de cámara es la adecuada.
Mi intención no es que te decidas por una marca específica pero sí por una cámara que te de lo que necesitas.
Lo primero es estar consciente para qué la vas a usar. Lo más común es comprar una cámara para darle un uso personal, es decir cuando te vas de viaje, vas a fiestas, tomas la foto del festival de los niños en la escuela, etcétera.
Es muy diferente cuando le vas a dar un uso comercial, es decir, si vas a empezar a cobrar por tus fotografías, ya sea que cubras eventos sociales o que mandes tus fotos a bancos de imágenes para que te paguen regalías. Así que antes de primero define para qué la quieres (incluso antes de si quiera ver de cuánto es tu presupuesto).
El precio no siempre tiene que ser el factor decisivo al comprar una cámara porque hay gente que se decide por un modelo porque es la mejor cámara que puede pagar y luego se arrepienten de haber comprado una cámara cara o que es tan grande que les parece incómoda de cargar.
En ocasiones el problema del precio es al revés, se compran la cámara que pueden pagar pero que no tienen todas las funciones que necesitan. En esas situaciones vale más la pena esperarse un poco y hacer una compra consciente al llevares el equipo que realmente van a utilizar. A veces por ahorrar en un primer equipo las personas terminan gastando de más al comprar dos cámaras.
Lo primero es ver qué tipos de cámaras existen.
Las cámaras compactas como esta son las más prácticas y se utilizan para capturar momentos, no estorban y las imágenes son mejores que las de los celulares porque aunque puedan tener más o menos el mismo número de megapixeles que un teléfono, estas tienen el lente y el sensor más grande, lo cual es una mejor calidad. El precio de estas cámaras está entre $1,700 y $3000 pesos.
Las cámaras intermedias son un puente entre las cámaras compactas y las cámaras réflex. También se les dice “compactas de alta gama”. Son más grandes que las compactas pero no son tan estorbosas ni pesadas. Generalmente las compra la gente que está aprendiendo más de fotografía porque ya incluye controles manuales (S,A,M,P) y esto ya permite experimentar con diferentes velocidades, diferentes aperturas, diferentes ISO e incluso algunas ya permiten el enfoque manual. Las imágenes que capturan son de mejor calidad porque tienen sensores más evolucionados y los lentes son más grandes y la óptica es muy importante en la nitidez de las imágenes. Algunas cámaras intermedias se pueden utilizar para fines comerciales (vender tus fotos) si vas empezando con cosas sencillas porque al poder usar los controles de forma manual ya puedes jugar con la iluminación y crear efectos más interesantes que tendrías con una cámara compacta. El único problema es que no a todas se les pueden cambiar los lentes y a pesar de que la calidad es muy buena (y cada vez las hacen mejor), no llega a brindar todo lo que una réflex ofrece. Su precio está entre los $3,000 y $7,000 pesos.
Las cámaras réflex son las profesionales, son para quienes quieren hacer de la fotografía una profesión o para quienes la fotografía es un pasatiempo que se toman en serio y quieren explotar lo que pueden crear con una buena cámara porque están conscientes de los resultados que obtendrán y lo mucho que pueden experimentar con un buen equipo. Hay de muchos precios, las más económicas están pensadas para gente que está aprendiendo a utilizar los controles y tienen muchas funciones automáticas también pero hay otras con sensores mucho más grandes y para lentes más anchos que permiten una calidad inigualable. Su precio oscila entre los $8,000 y $200,000 pesos o incluso más.
Con las cámaras réflex el cielo es el límite de lo que puedes hacer pero hay que estar consciente del uso que les damos porque no tiene sentido tener una cámara profesional y traerla siempre en automático, lo interesante es aprender a usar los controles.
Es importante que te preguntes si estás dispuest@ a cargar con esa cámara constantemente o no.
Lo mejor son los modelos más recientes porque tienen mejores sensores para captar la luz. Esto es independiente de los megapixeles. Hay cámaras modernas con menos megapixeles que dan mejores fotos que algunas anteriores de muchos megapixeles y todo es porque los sensores han ido mejorando muchísimo con los años.
Otra cosas que hay que tomar en cuenta es si vas a grabar video. La mayoría de las cámaras digitales también graban video en Full HD pero siempre la calidad que tengan va a estar delimitada por el tamaño del lente, el tamaño del sensor y el tipo de sensor.
Una última pregunta que debes hacerte es si necesitas lentes intercambiables o sólo un buen zoom. Las cámaras intermedias tienen una mejor óptica y puede ser todo lo que requieras si vas a tomar fotos familiares o para viajes pero si quieres ser más profesional necesitas forzosamente poder cambiar lentes.
Como verás hay muchas opciones y en este fin de semana de descuentos en todas las tiendas es fácil abrumarse con tantas opciones pero tienes que mantenerte claro lo que quieres y lo que necesitas. Ninguna cámara es buena o mala, lo que importa es que si quieres una buena cámara te tomes el tiempo para aprender a utilizarla o bien, si compras una compacta estés consciente de que tiene limitaciones.
Si tienes alguna duda o comentario, nos puedes escribir a nuestras redes sociales o aquí mismo, ya que habilitamos los comentarios dentro de los artículos del blog.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
