Desde que hace dos años Amazon.com adquiriera Twitch, su dominio del streaming a través de la Red ha sido implacable y ya casi no supone noticia alguna sino para sus competidores, que por más que pelean, casi se podría decir que la ven inalcanzable.
Buena parte de culpa de su éxito viene de mano de los e-sport, en los que se ha encontrado un gran filón. Juegos como League of Legends, Starcraft o Hearthstone arrasan en la plataforma, aunque en los últimos tiempos también se ha registrado un importante auge de los deportes mentales más populares. El póker es un buen ejemplo y jugadores como Jason Somerville ya tienen su status de estrella en Twitch, en parte gracias a que las retransmisiones desde su canal jcarverpoker son seguidas por una legión de fans. El ajedrez, que aún no cuenta con tanto tirón, pretende no quedarse rezagado y su industria trata de agudizar su ingenio para mostrarse también visible.
Un plan de marketing efectivo
Eso parece que ha hecho la multiplataforma de ajedrez Pure Chess, que el pasado viernes 9 puso en marcha una interesante promoción con motivo del lanzamiento de su último título, y para ello recurrieron a una de las populares batallas que en múltiples ocasiones hemos presenciado en Twitch. En esta ocasión, y a partir del reto Twitch Vs Pure Chess Grandmaster, se permitió conectar a miles de espectadores y jugadores en un enfrentamiento contra el Gran Maestro de ajedrez Simon Williams, que puso su conocimiento al servicio de los espectadores en las situaciones más extremas de su enfrentamiento.
Alrededor de 6.000 personas no quisieron dejar pasar la ocasión de enfrentarse a una estrella del ajedrez, votando por el siguiente movimiento de la partida en pos de doblegar al británico. La tarea no era sencilla y en la primera de las partidas Williams dominó la situación con solvencia para terminar ganado tras dos horas de juego.
El segundo enfrentamiento dio comienzo con un curioso hándicap para el Gran Maestro, de que debía jugar con los ojos vendados, valiéndose sólo de su mente para retener los movimientos que en plena partida le iba retransmitiendo un empleado de Ripstone Games. A pesar de nivel y del afán de sus rivales por derrocarlo, lograba imponerse de nuevo logrando la victoria en la segunda partida de este cara a cara.
Victoria imposible
Fue en el tercer choque cuando Simon Williams ya no pudo contener el empuje de los miles de usuarios que se sumaban a la batalla a través de Twitch y terminó renunciando al punto ante la imposibilidad de alcanzar la victoria. Posiblemente la fatiga mental tras las horas de juego fue desequilibrante para ceder ante sus adversarios, que en el futuro podrán presumir de haber batido sobre un tablero nada más y nada menos que a un Gran Maestro de ajedrez.
Además de la satisfacción personal por su gesta realizada, cada uno de los miles de participantes que colaboró en cumplir el reto fue recompensado con diverso material de Ripstone, como juegos de Pure Chess, Pure Pook y Pure Hold ‘Em.
Aquí tienes la repetición completa con el desarrollo del juego (Fuente: Twitch)
En 1999 ya se había llevado a cabo un evento similar cuando Gari Kasparov se enfrentó a un numeroso grupo de oponentes en el mismo formato. En aquella ocasión sus adversarios votaban los movimientos a través de mensajes, aunque eso tampoco les sirvió para doblegar al campeón ruso. Sin duda el método actual es mucho más eficiente, y tremendamente atractivo para el gran público, tanto si es especializado como si no.
En resumen, una buena maniobra de marketing a través de Ripstone Games para el lanzamiento de Pure Chess Grandmaster Edition, lo último de la saga Pure Chess que ya cuenta con más de 2,5 millones de jugadores. Este nuevo título ya está a la venta desde el pasado día 9 para Steam y Xbox One, a un precio de 12,99€.
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