Para demostrar que está diciendo la verdad, el autor de la intrusión ha enseñado una parte de los datos y los documentos a los que ha conseguido acceso. Pero Dropbox insiste en que no se ha producido ningún error en su sistema de seguridad, y que la vulnerabilidad puede deberse a aplicaciones de terceros, de donde el supuesto hacker podría haber conseguido el acceso a los datos. Si esto fuera cierto, es muy probable que los datos de los que disponga el pirata no solo provengan de Dropbox, sino también de otras cuentas y servicios.
¿Estamos de nuevo frente a un nuevo escándalo como los que se han producido en la nube de Apple y Snapchat? ¿Es solo un farol? ¿Están seguros nuestros datos cuando los subimos a nuestros almacenamientos en la nube, o somos demasiado descuidados con ellos? Por si acaso, habrá que guardar en otros soportes los contenidos más sensibles si no queremos quedar expuestos como les ha ocurrido a las famosas.