Los enemigos delgados
fuera y el área se abre. Ves a un poderoso oponente por delante listo para dar un
una gran pelea
Las batallas contra jefes son algunas de las partes más memorables de los juegos,
te hierve la sangre y te suda la cara cuando te enfrentas a un enemigo más allá de tu conjunto de habilidades. Finalmente triunfando sobre el jefe cuando se siente recompensado y en este nivel, da un paso adelante listo para enfrentar lo que sigue.
Sin embargo,
existe la rara ocasión en la que temes una pelea, no por dificultad, sino por
Quién es. Quizás vencer a un jefe puede tener un efecto negativo y hacerte sentir mal por vencerlo, tal vez hasta el punto de rendirse.
Un aliado cercano, un animal que se va por instinto o simplemente un amor
villano, estas peleas no te hicieron sentir bien después.
En un medio que profundiza cada vez más en el territorio gris cuando se trata de moralidad, elección y consecuencia, podría ser "incorrecto" enfrentar a este grupo, y realmente se meten en la cabeza por eso.
Reprima esas lágrimas, porque aunque este lote tuvo que bajar, ciertamente dejaron una marca.
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Nota: Spoilers dentro de los juegos mencionados.
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