Y terminamos el tema de otoño con esta imagen.
Se trata de un autorretrato hecho en un pueblo medieval abandonado desde el siglo 14. (¡Y que frío hacía!) Quería demostrar el paso del tiempo, el cambio de verano a otoño donde supuestamente se mueren las hojas en preparación para el invierno…Pero a pesar de ello otoño tiene su propia magia…
And here’s the last image in the autumn series.
It’s a self portrait taken in the ruins of a medieval village abandoned in the 14th century. (Blimey, it was cold!) I wanted to show the passage of time and how summer gives over to autumn, a time where the leaves begin to die in order to make way for winter…And that it is still magical all the same…
Nikon D300 – 18 mm – f/8 – 1/13 - ISO 200
Editada en / Editing: Photoshop + Photomatix Pro