¿Qué es fotografía macro?
El diccionario de la Real Academia Española lo define como “grande”, a diferencia de “micro” que significa “pequeño”. Por eso, por ejemplo, al hablar de macroeconomía uno se refiere a lo que conforma el comportamiento de los elementos agregados de la economía y en microeconomía al comportamiento de sus elementos individuales. Pero en fotografía estos términos no significan lo mismo. Canon y otros utilizan el término “macro” para identificar objetivos (lentes) que toman fotos a tamaño natural o “lifesize” y que se identifican con números o letras como: 1X (“one times lifesize”) o 1:1 (one-to-one). Por otro lado, Nikon identifica sus lentes “macro” con el término “micro”. En adelante nos limitaremos a hablar de equipo Canon que es el que conocemos y utilizamos.
Dicho lo anterior, para propósitos de este artículo, vamos a identificar la fotografía “macro” como aquella que se utiliza para fotografiar objetos o sujetos bien de cerca (“very close close-ups”) de manera que resaltamos sus detalles mínimos y donde el sujeto usualmente es bien pequeño y del reino animal, que son los más interesantes y difíciles de fotografiar.
Qué Objetivo Macro Me Compro???
Bueno, ya hemos decidido que esto del Macro nos gusta. Y queremos ir un paso más allá y dar un salto cualitativo en lo que a nuestro equipo se refiere… y claro, también en nuestros resultados fotográficos.
La compra de un objetivo Macro es algo que hay que meditar por varias razones.
La primera y, quizás, más importante es porque el desembolso que hay que realizar es considerable. Hay que tener en cuenta que cualquier objetivo Macro cuesta por encima de los 350-400€ nuevo. Claro está que siempre se puede recurrir al mercado de ocasión, donde se pueden encontrar lentes en perfecto estado y con un ahorro considerable.
La segunda razón fundamental que hay que tener en cuenta es el uso que vamos a dar generalmente a ese objetivo. Es decir, tenemos que pensar el tipo de fotografía Macro que vamos a hacer con mayor frecuencia.
No es lo mismo fotografiar flores que fotografiar piezas dentales.
Pero antes de pasar a explicar el tipo de objetivo que tenemos que comprar atendiendo al uso que vamos a tener del mismo, lo más lógico es conocer los tipos de objetivos Macro que hay en el mercado y sus características y diferencias.
Para empezar, hay que volver a recordar que llamamos Objetivo Macro a todo aquel, que sin añadir ningún elemento externo, es capaz de ofrecer una ampliación de 1:1.
Cabe destacar también que se trata siempre de objetivos de focal fija, y por lo tanto, debemos descartar todos aquellos que sean de tipo ZOOM o focal variable. Por mucho que aparezca la palabra “Macro” en ellos, no lo son realmente.
Y el verdadero meollo de la cuestión a la hora de elegir nuestro objetivo Macro es la distancia focal del mismo. En el mercado podemos encontrar objetivos macro de muy diversas distancias focales. Los hay de 50, 60, 65, 90, 100, 105, 150, 180 y hasta 200mm. Y todos ellos nos ofrecen por sí mismos, una ampliación de 1:1.
Bueno…. en realidad existe un modelo de objetivo Macro que tiene unas características propias, que le hacen muy especial.
¿Cómo puedo sacarle el máximo partido a mi objetivo macro?
Lógicamente lo primero que debemos hacer para aprovechar al máximo nuestro objetivo macro es acercarnos. ¿Cuánto? para empezar diremos que lo máximo que puedas. Ajusta el anillo de enfoque para enfocar a la mínima distancia posible y acércate al sujeto hasta que aparezca enfocado, de esta forma estarás tomando una fotografía lo más cerca que te permite el objetivo.
Siempre que sea posible usa el trípode y tómatelo con calma. Si tu cámara dispone de la opción de bloqueo del espejo, úsala, evitarás las vibraciones que produce el espejo al moverse en el momento que tomamos la fotografía. De esta manera evitaremos vibraciones mínimas que aparezcan ampliadas debidas a la proximidad del sujeto.
Sigue tomándotelo con calma, fíjate bien en la escena y busca un punto de máximo interés sobre el que centrar el enfoque. Puedes usar tanto enfoque automático como manual, pero lo importante es estar seguro de que enfocamos donde queremos. En insectos el punto de interés suelen ser los ojos, el más próximo. Si fotografiamos flores, los estambres con el polen, fotografiando objetos, depende de cada ocasión y de nuestras intenciones.
No te limites a buscar una flor o un insecto, acercarte y disparar, eso lo puede hacer cualquiera. Si quieres fotografiar naturaleza busca situaciones especiales, las horas del día en que la luz sea mejor y, si es necesario, ayúdate con iluminación artificial, busca mejores composiciones y aprovecha el control sobre la profundidad de campo. No dejes que tus fotografías macro se limiten a tomar fotos de cerca.
En fotografía macro no todo es fotografiar flores e insectos, busca objetos con detalles y texturas interesantes. Realiza composiciones en las que gracias a la aproximación obtengas fotografías abstractas interesantes. En definitiva, sé creativo.
A tener en cuenta…
Con la fotografía a muy corta distancia tendremos algunos detalles que debemos tener en cuenta:
La distancia mínima de enfoque: Cada lente tiene una distancia mínima desde la cual podemos enfocar; esto podría ocasionar que obtuviéramos una imagen fuera de foco o que no podamos hacer el disparo, según como este configurada la cámara.
La profundidad del campo: a menos distancia menor profundidad del campo, si usamos una apertura que de por si ocasione una profundidad del campo más pequeña, debemos saber que si nos acercamos, esta se reducirá mas.
La falta de luz: Al aproximarnos a algo con la cámara, nosotros mismos ocasionamos que nuestra sombra oscurezca lo que queremos fotografiar.
El enfoque: Con poca luz el enfoque automático falla; además a tan cortas distancias el enfoque manual se vuelve lento y en fotografía de insectos, no podemos perder un segundo o se nos escapa.
La Trepidación o movimiento: En las fotografías muy cerca de algo, sucede lo que experimentamos cuando usamos una lente telefoto a pulso, la más mínima vibración ocasionara una imagen movida, incluso con nuestra respiración.
El viento: En lugares en el exterior, nuestro principal enemigo es el viento; si logramos controlar todo lo anterior, el viento será el que nos tenga en jaque a cada momento, si lo que queremos fotografía se encuentra en una rama o en una flor.
Cada uno de estos problemas debe ser resuelto y debe ser tomado en cuenta en cada ocasión que vayamos a hacer una fotografía donde nos acerquemos a nuestro sujeto.
¿Existen opciones más económicas?
Aunque generalmente los objetivos macro presentan unos precios intermedios, disponemos en el mercado de algunas opciones que por un lado ayudan a obtener mayores aproximaciones con los objetivos macro y por otro lado podríamos decir que simulan los efectos de estos objetivos.
Una opción bastante económica y útil son los tubos de extensión, que suelen venderse en lotes de varios tubos con distintas distancias focales de ampliación. Se sitúan entre el objetivo y el cuerpo de la cámara y tienen dos inconvenientes principales. La pérdida de luz que producen (dependiendo de la extensión perderemos más o menos luz) y que algunas funciones automáticas del objetivo pueden perderse.
Una segunda alternativa son los filtros o lentes dióptricas que se enroscan en la parte frontal del objetivo y actúan como lentes de aumento por lo que no tendremos que acercarnos más al sujeto sino que directamente aparecerá más grande. En este caso no se pierde ni luz ni ninguna función, pero sí una cierta calidad de imagen en el caso de que estas lentes no sean de gran calidad.
Y finalmente la opción más económica de todas, coger un objetivo que no sea macro y colocarlo delante de la cámara pero invertido, es decir, con la parte en la que enroscaríamos los filtros hacia el sensor y la rosca del objetivo hacia lo que queremos fotografiar. No podremos conectar el objetivo a la cámara, por lo que algunas cámaras puede que no nos permitan disparar al no detectar objetivo y en todas, perderemos las funciones automáticas salvo la medición de la luz por TTL.
Únicamente podremos ajustar la apertura del diafragma en aquellos objetivos que dispongan de un anillo para ello y no cierren automáticamente el diafragma al máximo en cuanto se desconectan del cuerpo. El enfoque deberá ser siempre manual.
Con esta última opción es importante tener cuidado de que no se nos caiga el objetivo, vigilar que sujetamos el objetivo lo más ajustado al cuerpo de la cámara posible y evitar al máximo que entre polvo en el sensor si no queremos tener que limpiar el sensor después de la sesión macro.