Gina, el cocodrilo.
Hasta aquí la historia puede ser en cierta manera normal, lo extraño es cuando Rimma Golovko (la turista) les conto lo sucedido a los encargados del zoo no creyendo ni una palabra de la propietaria del teléfono y aquí ocurrió lo impensable alguien llamo al teléfono de Rimma y comenzó a sonar en la tripa del cocodrilo.
Este caso llama la atención y muestra la dureza de algunos terminales. Aunque este le haya causado indigestión a Gina el cocodrilo y este causando graves problemas al zoo ya que se está negando a comer y se está empezando a plantear la posibilidad de plantearle cirugía para extraer el terminal. Esto último es lo más deseable por Rimma, que desea recuperar las fotografías que tenía en el terminal, incluso la ultima la que le costó un buen susto.
No es la primera vez que un animal se come un móvil y sigue funcionando en Febrero de 2009 un pescador de Inglaterra capturo un gran bacalao y al abrirlo descubrio dentro un Nokia 1600. El pescador llamo entonces a uno de los números grabados en la tarjeta SIM y contacto a un amigo del dueño y devolviéndole el terminal.
Esperemos que la historia tenga un final feliz sobre todo por el cocodrilo.
Fuente: Blog Nokia
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