Todos los fabricantes de terminales realizan pruebas para ver hasta dónde pueden llegar sus dispositivos y los niveles máximos de resistencia de estos. Y los usuarios de estos terminales siempre tenemos miedo a que nuestro terminal se golpee, se moje o le suceda cualquier cosa que lo convierta en un trozo de plástico inservible.
Aquí hemos presenciado cómo se rompía la pantalla de un SIII, de un Galaxy Note, HTC Desire, etc., pero esto lo hemos sufrido en directo, pero lo que realmente nos asombra es ver las pruebas o torturas a las que someten los fabricantes sus terminales, como sobreviven a caídas y golpes tremendos.
También se realizan pruebas de resistencia al uso como la pulsación de los botones físicos de estos terminales, en este caso 200.000 pulsaciones, resistencia a ralladuras con llaves, a la presión de sentarse sobre el terminal.
Y como un vídeo vale más que mil palabras aquí podéis ver las torturas a las que someten al pobre SIII, ¡No lo intentéis en casa!