Araña desalmada

Tú, máscara infinita del deseo.

Araña desalmada
Vacías, las cuencas de tus ojos...
Boca repleta de sangre derretida,
de tus lentas presas agonizantes.
Tú, araña desalmada rabiosa.
Tu reloj no marca las horas,
si nadie en tus hilos se posa,
para derretir su corazón.
Buscas otra presa jugosa,
para deshacer su alma lechosa
entre miles de trampas rosas,
que sabes proclamar,
como misa en cumbres hermosas.
Pobre de ti, maraña desalmada.
Tú, infinita soledad sin calma,
tratas de llenar tus desiertos
con la humanidad de las almas
que envidiosa desalojas...
Mis letras de olvido devoras,
a ciegas sé que te desbordan.
Estas son mis últimas caricias,
a tu alma espectral y sinuosa.
Ojalá un día comprendas,
que en ese carruaje
sólo llevas tatuajes
de almas heridas,
moribundas por ti.
Que aunque seas impasible
y el llanto del extraño
aplaque tu dolor.
Ellos desconocen
que dentro de tus harapos
sólo encuentran mazazos
que destruyen todo amor.
Levanta la calma.
No eres bendito,
pero: ¿Sientes compasión?
Es probable que no...
Sólo deseo en lo más profundo de mi alma
que llegue la calma a tu inerte corazón.M. Araque

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