En la demanda presentada en Irlanda, aunque también en Inglaterra, Brave indica que Google violasistemáticamente,y a gran escala, el reglamento de protección de datos (RGPD), con parte del sistema de publicidad personalizada. La queja afirma que cuando un usuario visita una página web, muchas empresas reciben sus datos personales para colocar anuncios relacionados, sin que se notifique al usuario.Johnny Ryan, responsable de políticas en Brave, declaró:
"Hay una violación masiva de datos en el corazón de la industria de la publicidad conductual. A pesar del período de dos años previo a la instauración del RGPD, las empresas no lo han cumplido".
Si Brave ganara esta batalla legal, Google podría recibir una multa considerable, de alrededor del 4 % de su facturación. Sin embargo, la poderosa firma con sede en Mountain View dafirma que ha implementado fuertes medidas para cumplir con el RGPD. Google cdeclaró a través de ZDNet:
"Integramos la confidencialidad y la seguridad en todos nuestros productos desde el principio y nos comprometemos a cumplir con las reglas generales de protección de datos vigentes en la UE. Brindamos a los usuarios el control y la transparencia de todos los datos significativos para cualquiera de los servicios que ofrecemos en la UE, incluida la publicidad personalizada".