En la costa de Gijón (España) junto con la fauna autóctona ha aparecido un curioso habitante, un pez robótico bautizado como G9 y diseñado para cuidar el medio ambiente dentro del proyecto SHOAL
Actualmente la legislación Europea obliga a todos los puertos de los miembros de la unión a una vigilancia de la calidad de sus aguas, que actualmente se realiza tomando muestras con buceadores que posteriormente las llevan a diferentes laboratorios para analizar con un coste que ronda los 100.000 euros anuales.
El G9 tiene forma de pez y cuenta con sensores infrarrojos en los ojos y la boca para moverse sin chocar con obstáculos y poder recoger muestras analizándolas al instante. Se mueve gracias a tres motores eléctricos silenciosos con una autonomía de 8 horas, que le permiten desplazarse y pasar desapercibido para el resto de fauna marina mientras realiza sus labores de vigilancia.
El coste de este pez robótico es de 25.000 € siendo un cuarto del coste actual de vigilancia de aguas por parte de submarinistas y ha sido desarrollado por La autoridad portuaria gijonesa, el British Marine tecnologies, Thales Safare S.A. y las universidades de Cork, Essex y Strachclyde.
De momento este prototipo tan solo vigila la calidad de las aguas de Gijón, pero probablemente se convierta en algo común en poco tiempo.
Mas info: http://www.roboshoal.com/
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: