Si no vives como quieres, ten presente que la vida que tienes ahora es una elección que hiciste en el pasado. Me dirás: ¡Tengo una gran familia que depende enteramente de mí! , ¡No tengo más opción que trabajar en esto o aquello!. La realidad es que unos valores prelan por encima de otros. Las obligaciones mínimas que tenemos para quienes amamos frecuentemente se anteponen al ejercicio de la libertad personal. Si ya tienes una familia, hipotecas, deudas o padres ancianos que mantener entiende que la mayoría de esto lo tienes por elección propia. Fue una quizás inconsciente pero fue una elección de todas maneras.
Nunca, nunca pienses que no tienes elección. La realidad es que cuanto más aumentan las obligaciones y las responsabilidades tu margen de elección se reduce proporcionalmente. Pero siempre está allí. Aún si te encontraras al borde de la muerte, puedes elegir con qué actitud enfrentarla.
Fuente: este post proviene de Blog de Maricelis84, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: