Y es que el MWC es mucho más que una feria, convención, congreso… está muy por encima de todo eso y no por desmerecer otras importantísimas ferias que se llevan a cabo en los lugares de alto nivel donde también lo hace el MWC (en este caso Fira Barcelona), sino por lo milimétrico de la planificación de este evento por parte de empresas, organizadores y participantes. No es para menos: se mueve la friolera de 500 millones de euros en tan sólo 4 días o lo que es lo mismo, lo que valdría comprar todo el Atlético de Madrid, estadio, plantilla y filiales incluido.
Estas cifras, si bien nada hay que dejar al azar para cualquier feria, hacen que toda la organización e incluso toda la ciudad, se movilice en torno a este baluarte de las ferias incluso meses antes: ya están más que en marcha los preparativos de la próxima edición, desde la reserva por completo de hoteles hasta el importantísimo diseño de stand para Mobile World Congress 2017, todas unas piezas de arte que atraen a más de 100.000 visitantes.
Una feria en primera plana
Si los datos económicos no te son suficientes para entender el alcance del Mobile World Congress y por qué es considerada la feria entre ferias, en mayúsculas, haz un simple ejercicio de memoria: ¿qué feria de todas las que se celebran, puedes recordar que se esté celebrando en estos momentos?, es más, ¿cuántas ferias sectoriales conoces?
Probablemente te cueste responder a qué está sucediendo ahora mismo en el palacio de congresos de tu ciudad, pero no te cabe duda de que cuando llega la fecha del MWC saber perfectamente todo lo que sucede a su alrededor.
Una feria en la que todos quieren estar
¿Recuerdas la última vez que Mark Zuckerberg se paseó por tu ciudad? El capo de Facebook no duda en acudir año tras año a Barcelona, donde incluso se deja ver practicando running frente a la Sagrada Familia, pero no viene nunca solo: Jan Koum fundador de whatsapp, Virgina Rometty presidenta mundial de IBM, Rich Riley el director ejecutivo de la «moneda virtual» Big Coin son solo algunos de los jefazos mundiales que marcan en rojo esta cita en la capital catalana.
Una feria en el punto de mira
Las cifras de vértigo que mueve el Mobile World Congress es todo un caramelo para cualquier centro de convenciones de primera división: a los 500 millones de euros que mueve y los más de 100.000 prestigiosos visitantes que no dudan en pagar por una entrada mínimo 780 euros pero incluso hasta 5.000 euros por el pase platinum, se le suma toda la publicidad y toda la infraestructura que trae tal acontecimiento (hasta el punto de inaugurarse toda una línea de metro para la ocasión).
Este hecho hace que su organización esté medida al milímetro, que otras ciudades como Madrid se disputen su organización (comprometida rápidamente con Barcelona hasta al menos 2023), y que antes, durante y después de su celebración, cope portadas de diarios, telenoticias y páginas enteras de internet.