Los jugadores llevan una eternidad lamentándose de los elevados precios de las tarjetas gráficas. Todos nos alegramos cuando la minería de criptomonedas quedó obsoleta, sabiendo que por fin iban a bajar los precios, pero en general no ha sido así. Las últimas GPU siguen estando fuera del alcance del consumidor medio, e incluso las tarjetas más antiguas mantienen su valor.
En una conferencia con los inversores celebrada el martes por la noche, la Directora General de AMD, Lisa Su, trató de calmar la ansiedad de los inversores señalando que la compañía ha estado, y seguirá, rebajando la oferta de GPU para “equilibrar la oferta y la demanda”.
“En el tercer trimestre y en el cuarto subimos la producción”, dijo Su a los inversores. “Pero subasteceremos, en menor medida, en el 1T”.
Por supuesto, eso es sólo otra forma de decir, “vamos a mantener los precios inflados bajando nuestra producción.”
Muchas empresas de hardware se acostumbraron a la elevada demanda provocada por la pandemia y el auge de las criptomonedas. Ahora que ambos factores están disminuyendo, las empresas se encuentran con un excedente de inventario y están tratando de inclinar la balanza para mantener sus números altos para los inversores.
Las leyes naturales de la economía dictan que bajen los precios para mover esos productos. Sin embargo, eso significa disminuir los enormes márgenes de los que han disfrutado.
El margen bruto no-GAAP de AMD se disparó hasta el 51% el trimestre pasado. Si se redujera, los inversores lo considerarían una pérdida. Sin embargo, cobrar precios normales por los productos no es tener pérdidas. Pero a los inversores sólo les importa el corto plazo (cifras trimestrales) razón por la cual las empresas se ven constantemente presionadas para garantizar un crecimiento positivo.
No es único de AMD
Pero AMD no es el único culpable que intenta evitar unos cuantos trimestres malos. Esta semana hemos visto un movimiento similar con Sony. El martes, unos filtradores dijeron que Sony estaba recortando los envíos de su nueva PS VR2 en un 50 por ciento. El año pasado, la compañía dijo a los inversores que esperaba enviar dos millones de PS VR2 en el primer trimestre de 2023. Ahora, no cree que pueda superar la barrera de los dos millones de unidades hasta finales de 2023 o principios de 2024.Sin embargo, Nvidia se adelantó a ambos. En noviembre, la directora financiera Colette Kress dijo a los inversores que la compañía estaba combatiendo el descenso de la demanda reduciendo los envíos.
Esta es la razón por la que todavía vemos tarjetas que se venden al por menor por 1.000 dólares, el precio que los mineros estaban dispuestos a pagar. Estas empresas necesitan un golpe en el NASDAQ para que se den cuenta de que la gente normal no paga tanto dinero por un componente informático.
La solución es relativamente sencilla. Paciencia, guarda tu dinero por ahora. Es una economía difícil. Tal vez el mero hecho de que los jugadores digan “no” durante unos cuantos trimestres demuestre a los fabricantes de equipos que su falso desabastecimiento ya no cuela.
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