En mi casa no entran más objetivos analógicos. Tengo de todo, desde un zoom de 200 mm hasta un gran angular, peeeeeeeeeero, como he dicho, todos analógicos. Un día mirando por Internet me encontré con una página en la que mencionaban unos adaptadores con los que poder usar esos objetivos analógicos con cámaras de última generación. Bueno, no tarde ni 2 minutos en comprar uno y ahora quiero daros mi opinión sobre él:
Antes de hacer el pedido intenté informarme y como era de esperar, me llovió información. Primero me dijeron que el adaptador rozaba con el cristal, que había que limarlo, que los objetivos no encajaban bien, que a veces se salía solo? un sinfín de cosas que hasta que no lo tienes en tus manitas no puedes confirmar. Pues bien, hoy quiero confirmaros tooooodo lo relacionado a este adaptador, vamos al lio.
El aparatito no puede ser más simple, viene en una caja de cartón sin nada. Un anillo de metal sin más.
Ponerlo es relativamente fácil ya que trae las clásicas señales que deben coincidir para que el adaptador encaje. Se coloca muy bien, no hay que ejercer casi fuerza y queda bien adherido.
Una vez puesto, encajar el objetivo en la cámara es muy sencillo. A mí me gusta mucho como queda pues (al menos el mío) sujeta muy bien y no se suelta solo.
Ahora viene lo bueno, las pruebas. Para hacer las pruebas utilicé un zoom, un macro y un 135. A ver que os parece.
A mi me gusta pues es como antiguamente se fotografiaba, tirando de paciencia y destreza. El resultado me parece bastante bueno, sobre todo si te quieres ahorrar una buena cantidad de dinero.
Para terminar, una vez acabada la sesión lo peor es quitar el adaptador del objetivo. Hay que ejercer un poco de fuerza y girar hacia adelante y atrás hasta que desencaja, es el punto más flojo para mí porque por lo demás me gusta mucho. ¿Lo tenéis? ¿Qué os parece?
Fuente: este post proviene de El Gurú de la Fotografía, donde puedes consultar el contenido original.
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