Antes de empezar, es importante tener en cuenta que desinstalar Cortana no borrará ninguno de tus datos personales o configuraciones. Sin embargo, si tienes algún archivo o documento asociado a Cortana, se eliminará.
1. Abre el menú Inicio y escribe Configuración. Abra el menú Inicio y escriba Configuración en la barra de búsqueda.
2. Haga clic en Apps en la ventana Configuración.
3. Desplácese hasta la sección Cortana y haga clic en Desinstalar.
4. Confirme la desinstalación haciendo clic de nuevo en Desinstalar en la ventana emergente.
5. Una vez finalizada la desinstalación, reinicia el ordenador para que los cambios surtan efecto.
¡Y ya está! Has desinstalado correctamente Cortana de tu ordenador con Windows 11. Si alguna vez decides volver a instalar Cortana, puedes hacerlo descargándola desde Microsoft Store. Es importante tener en cuenta que la desinstalación de Cortana puede afectar a otras características de tu ordenador, como los comandos de voz y las funciones de búsqueda, así que asegúrate de leer sobre cualquier posible problema antes de proceder.