La Prioridad de apertura es el modo que emplearemos cuando queremos seleccionar una apertura pequeña específica para maximizar la profundidad de campo, o una apertura grande para reducir la profundidad de campo y así poder aplicar un enfoque selectivo. En estos casos, la velocidad de obturador no nos importa (hasta cierto punto), así que asumimos el cálculo automático que realizará la cámara para su valor.
También podemos seleccionar la prioridad de apertura cuando deseemos una velocidad de obturación alta y bajo condiciones de iluminación variables, siendo la elección en este caso porque prefiramos evitar que la cámara utilice una apertura demasiado amplia. La apertura permanecerá constante en el valor que seleccionemos (por ejemplo f/5,6), pero la velocidad del obturador variará hasta donde le permita la iluminación disponible, alternando según los valores más adecuados calculados automáticamente por nuestra cámara.