Hay dos formas de hacerlo, la primera y la más fácil es para las versiones de Office 2013 y siguientes, basta con ir a Archivo – Recientes y en la parte inferior derecha nos aparecerá “Recuperar documentos sin guardar”.
La segunda opción, que está para todas las versiones consiste en abrir la carpeta temporal dónde se guardan nuestros archivos:
Debemos ir a Archivo – Opciones y seleccionar la pestaña de guardar. Una vez en esta pestaña podremos ver la ruta en la que se guardan nuestros archivos de forma temporal, basta con copiar la ruta en un explorador y pulsar a abrir el archivo.
No está demás, cambiar el tiempo en la que guarda Word los archivos de auto-recuperación y reducirlo, por si perdemos los datos que el guardado esté lo más actualizado posible.
Nota: para cualquier otro documento de Office lo anterior también sirve.