Eso es lo que ha pasado con Zetta. La marca extremeña apenas era famosa a nivel nacional, en ciertas ocasiones habían tenido su hueco en la T.V. extremeña, mas muchos no la conocimos hasta el momento en que El Español les dedicó un artículo en su página web el día de ayer. Los sueños terminaron prontísimo, cuando Forocoches se puso en marcha para destapar la verdad sobre la marca, que cogía diferentes modelos de Xiaomi para venderlos como suyos.
Zetta se vendía hasta hace pocas horas como el milagro extremeño. Un técnico electrónico de Badajoz, Unai Nieto, y un inmigrante chino, Eric Cui, cuentan en El Español que sus caminos se cruzaron cuando el primero fue a adquirir un móvil a la tienda del segundo. Eric trabajaba en un prototipo de móvil con fallos de software, que Unai, con conocimientos sobre sistemas operativos móviles, consiguió solucionar.
De esta manera nació Zetta, que lanza su primer móvil inteligente en el último mes del año de dos mil catorce. Cuentan al diario digital que en el primero de los días se vieron desbordados, vendiendo quinientos unidades en su primer día, mientras que en la trastienda proseguían “acoplando” más teléfonos, puesto que adquirían las piezas precisas a China mas el ensamblaje, en teoría, se efectuaba en Zafra.
De aquel primer Zetta Conquistador pasaron a un catálogo con más de doce de terminales. Conforme Unai, el éxito (local) de su marca residía en ir siempre y en todo momento un paso por delante de las grandes marcas: si estas apostaban por las 5 pulgadas se pasaban a las cinco con cinco, si lanzaban terminales con dos GB de RAM tenían uno con 3… De este modo hasta el Zetta Metal, que catalogan prácticamente como un “iPhone killer” por la mitad de coste.
La verdad: Zetta son Xiaomis renombrados
Con su aparición en El Español el día de ayer, Zetta lúcida un mayor interés, mas pronto se conoce la verdad. Esos fantásticos móviles de costos ajustados mas de alta calidad que se diseñan y acoplan en Extremadura ocultan tras ellos una enorme mentira: Zetta solo coge diferentes modelos de Xiaomi y Doogee y les pone sus pegatinas y software.
Aparecen las primeras fotografías en las que se advierten que bajo la pegatina de Zetta aparece el logotipo de Xiaomi y los ficheros del sistema que revelan que estamos frente a un Xiaomi. El timo es obvio: venden terminales chinos a un costo superior al que se pueden lograr. Algo que difícilmente tiene defensa, especialmente cuando se procura esconder la verdad. A esto hay que sumar que pretendían hacerse pasar como fabricante nacional, cuando realmente el único proceso de ensamblaje era poner unas pegatinas y alterar el software.
A la espera de que haya un comunicado oficial por la parte de la marca, que bastante difícil salida va a tener, lo único que hemos podido conocer son las presuntas palabras de Unai Nieto en una charla vía Telegram, en la que aparte de presumir del empleo creado o bien de ofrecer un SAT en Extremadura, alardea de que podría cerrar la sociedad tras Zetta sin grandes pérdidas. ¿Va a haber consecuencias? FACUA ya está demandando que a los usuarios que adquirieron un Zetta se les devuelva el dinero, mientras que solicita acciones a la Junta de Extremadura.