Siendo breves, se te aplicará la misma tarifa tanto en tu país como en los otros 28 países miembros de la Unión Europea, Noruega, Islandia y Liechtenstein. Reino Unido está incluido también, al menos hasta que llegue su salida de la Unión Europea, entonces dependerá de las relaciones que lleve con Bruselas y, por el momento, no hay motivos para ser muy optimista al respecto.
Si viajamos a cualquier otro país tendremos que pagar la tarifa que se acuerde con la compañía por roaming. Además, si tu tarifa contara con un límite de datos muy grande, la empresa podría, previo aviso e información, limitar la tarifa y avisar cuando se alcance el máximo.
También se vigilará que no se contraten tarifas más baratas con compañías de otros países, vigilando durante 4 meses que no pasen más tiempo fuera del país que dentro. En estos casos los costes que las operadoras tienen que asumir los tendría que pagar el cliente. Estos costes son: 0,32 euros por minuto de llamada, hasta 7,7 euros por GB y 0,1 euros por SMS.
Por otra parte, esta medida se aplicará tanto a las tarjetas de prepago como a los contratos. La única diferencia es que las tarifas de tarjeta tendrán que se limitarán los datos y las llamadas en otros países y tendrán que seguir activando el roaming.
¿Haréis buen uso de esta medida? Finalmente ha llegado el día en que podremos viajar por Europa sin temer a la hora de coger una llamada.