Primero fueron los estándares, luego los frameworks, y recientemente las arquitecturas. Ahora viene el turno de los Sistemas Operativos organizacionales. Todos estos intentos de que funcionen las cosas y las personas en patrones comunes obedecen al fin de compartir recursos, abaratar costes de mantenimiento, facilitar las comunicaciones, y por supuesto, fijar mecanismos de desarrollo en igualdad.
Bajo estás ideas, en el campo de la informática, más computacional que organizacional, se han estado construyendo, e intentando construir, estos "mecanismos de igualdad". Algunos han sido exitosos y siguen vigentes y muchos otros han caído en desuso o simplemente nunca vieron la luz pública. Primero fueron los estándares, y luego vinieron los patrones (patterns). Esta sumatoria dio paso a los Frameworks que condujo a -o que es lo mismo según las definiciones- las arquitecturas. De todos estos nombres, hay abundante literatura, casos, experiencias y gurús, consultores y certificaciones, y lo más importante, hay muchas personas dispuestas a seguir y aplicar estos mecanismos, pero sin analizar el impacto real ni analizando si conseguirán realmente los supuestos ahorros estructurales que deben generarse. Entre todos estos mecanismos no hay una línea de tiempo que les relaciona, simplemente van saliendo y alguien va intentando ordenarlos.
Lo importante es que han mostrado ser elementos organizadores siendo muchos de ellos teóricos o sin una base práctica bien fundamentada. Por eso hablar del caso del sistema operativo de ciudad, el City-OS de Barcelona, es un caso a destacar. Es la suma de todos los otros mecanismos pero con una base concreta basada en tecnologías probadas o al menos legacy (ojo, por legacy ya no hablamos solamente de sistemas antiguos de la era Cobol o Fortran, sino que debemos incluir sistemas y tecnologías de los últimos 20 años). El proyecto City-OS permite tener un elemento común de comunicación entre ciudades, que conduce a una nueva fase en la economía de la información.
City-OS /// Barcelona
Mientras muchas empresas y gobiernos intentan construir arquitecturas usando de referencia experiencias ajenas a su realidad social y tecnológica, un concepto de Sistema Operativo permite construir una base común a partir de la propia realidad de un territorio o comunidad o nación.
Es importante que quienes están invirtiendo en construir arquitecturas basadas en estándares, patrones, arquitecturas o frameworks que no han sido probados al nivel de detalle de un sistema operativo, reflexionen sobre sus inversiones en tiempo y dinero que están dedicando.
Si hay una aclaración. El City-OS claramente se funda en un sistema de plataformas y arquitecturas computacionales, pero se ha concebido como un Sistema Operativo organizacional ... urbano ... territorial. Aclaro este asunto, pues City-OS no es un tema tecnológico, sino -al menos- un tema antropológico, económico y cultural.