Es difícil conciliar lo que es con lo que pudo haber sido, sintió anoche Florencia, justo antes de que sea lunes y al principio del final de lo que fue y no fue.
Es difícil, pensó. Difícil, repitió.
Repitió en voz baja cuando las ilusiones se le agolparon de golpe y sin aviso en un costado del corazón, en ese rincón donde guarda lo que nunca será para dejar espacio a todo lo bueno que ahora vendrá.
Luciana Salvador Serradell