La idea general del supermercado de Amazon, es una tienda a la que los usuarios puedan acceder libremente, en la que no existe personal humano, por lo que el autoservicio se vuelve un concepto totalmente literal. Se cuenta con muchos sensores que detectan digitalmente la cantidad de productos existentes. Los compradores deben descargar la aplicación Amazon Go a sus teléfonos y con ella tendrán acceso, al mismo tiempo sus cuentas bancarias están vinculadas para efectuar los cobros.
A pesar de que Amazon había comentado que abriría dicha tienda en 2017, tuvieron ciertas dificultades que retrasaron el lanzamiento. Entre las cuales se encontraron que el sistema funcionaba bien con pocos usuarios comprando, pero cuando la demanda se incrementaba, el sistema tenía errores al cobrar y para detectar la cantidad de productos en existencia, por lo que pasaron casi un año entrenando al sistema en la idea de reducir al máximo posible los errores.
Por el momento, el supermercado inteligente contará con algunos miembros del personal, para atender cualquier eventualidad en cuanto a los cobros y rectificar las cantidades de productos en los estantes, hasta que se tenga la seguridad de que la automatización es plenamente funcional.
Este podría ser el comienzo de las tiendas totalmente automáticas, pero se requiere al mismo tiempo un nivel de cultura y civilidad por parte de los usuarios, para operar de manera adecuada. ¿Estaremos preparados para tiendas de este tipo?
Vía Recode | Mashable