Para evitar estas situaciones de la exposicion de fotografias te recomendamos que compenses manualmente la exposición ya que, a menudo, la función de exposición automática de la cámara no es capaz de elegir la exposición óptima para cada escena. Estos son los casos en los que precisamos “compensar la exposición”.
Por ejemplo, con la elevada reflexión de una escena nevada, la función de exposición de fotografias automática tiende a oscurecer la escena para compensarla, haciendo la nieve gris y las caras de las personas oscuras. En este caso, mediante la compensación de exposición positiva la cantidad de luz aumenta.
Además, en escenas donde hay un negro intenso con baja reflexión de luz, la exposición automática aumenta la luminosidad de la escena, haciendo las caras de las personas muy blancas. En este caso, mediante una compensación de exposición negativa, se reduce la cantidad de luz.