Para muchos la palabra emprendedor y empresario es lo mismo, sin embargo no es así. No todos los emprendedores son empresarios o quieren llegar a serlo, no todos los empresarios han querido ser emprendedores. Es por eso que en este artículo te vamos a explicar algunas de las diferencias que tienen estos conceptos.
Un emprendedor es una persona soñadora, no se cierra ante nuevas oportunidades, lucha por hacer o sacar los proyectos que quiere aunque le digan loco o que no puede. El emprendedor toma acciones para lograr sus objetivos y metas, le gusta ver a futuro. Al emprendedor le sobra actitud, tiene actitud de líder más no de jefe, y a pesar de vivir en un mundo pragmático, mueve al mundo día a día con sus acciones y sus ideas. Al emprendedor lo mueve la emoción, al empresario lo mueve la razón. El emprendedor tiene actitud de sobra, el empresario desarrolla aptitudes diferentes.
Un empresario considera a los clientes su principal fuente de ventas y beneficios, sin clientes no hay negocio; el emprendedor toma a sus clientes como lo mejor de su proyecto, personas que no se pueden decepcionar. Los empresarios no suelen arriesgarse ante diversas situaciones ya que cuidan mucho el dinero y no quieren arriesgar de más; los emprendedores asumen el riesgo, incluso algunos viven en un riesgo permanente por alcanzar su sueño empresarial.
El emprendedor es muy bueno solucionando problemas, el empresario es bueno definiendo estrategias y objetivos y así poco a poco adentrarse a los problemas, el emprendedor premia el esfuerzo, el empresario premia solo los resultados del esfuerzo.
El empresario define el éxito como consecuencia del trabajo de su empresa y los beneficios que proporciona a los accionistas. El emprendedor no tiene una clara definición de lo que el éxito es, lleva a cabo su plan y con el paso del tiempo al ir cumpliendo sus objetivos llega a este.
El empresario hace todo lo que está en sus manos para sacar a la competencia del mercado, establece alianzas y coopera con otras empresas, le gustan las sociedades mientras tengan metas en común. Para el emprendedor él es su propia competencia, le gustan los retos y superarse a sí mismo.
El empresario está centrado en su tiempo, no le gusta perderlo, tiene claros sus horarios de trabajo y su agenda bien organizada. Para el emprendedor no existen horarios, días festivos o vacaciones, su proyecto es su vida, y sabe que no tiene que establecer este tipo de cosas pues todo el tiempo está luchando por sus objetivos.
A pesar de las amplias diferencias que existen entre los empresarios y los emprendedores, se debe entender que se puede tener una combinación entre ambos para alcanzar tus metas y objetivos. No hay porque cerrarse entre uno u otro término.
¿Quién dice que lo emprendedores y los empresarios no pueden ser uno mismo?