Uno de los datos más interesantes que podemos mirar en la ficha técnica de los procesadores móviles es su litografía. Algunos expertos en la materia señalan que para 2024 podríamos tener sobre la mesa procesadores de 1 nm. Esta cifra todavía nos suena a ciencia ficción, ya que actualmente el mercado está plantado en los 7 nm, una cifra que podemos ver, por ejemplo, en los topes de gama de los principales fabricantes de semiconductores, como el Kirin 980 de HiSilicon o el Snapdragon 855 de Qualcomm. Sin embargo, en base a una reciente filtración podemos empezar a prepararnos para la llegada de los procesadores de 5 nm en 2021, de la mano del Snapdragon 875.
¿Qué sabemos por ahora sobre el Snapdragon 875?
Los planes de Qualcomm en su hoja de ruta pasan por lanzar la renovación de sus chips móviles a principios de 2020 con el Snapdragon 865, un SoC que se espera se mantenga en los 7 nm actuales. Sin embargo, si miramos hacia un horizonte más lejano, el paso más grande se daría en la siguiente generación, con un Snapdragon 875 que llegaría en un tamaño de 5 nm fabricado por TSMC, quien también fue el encargado de fabricar el Snapdragon 845 y el 855.
Esta reducción en su proceso de litografía tiene dos claras ventajas: mayor rendimiento con un menor consumo. Explicado de una forma breve y demasiado sintética, pero fácil de entender, a menor tamaño en estos chips mejores datos se pueden obtener en términos de eficiencia y potencia.
El futuro cercano pasa por el Snapdragon 865
Suele ser habitual que Qualcomm presente las novedades de sus procesadores móviles en el último mes del año. Si se sigue el calendario establecido por tradición, podríamos conocer todos los detalles de su próxima generación, el Snapdragon 865, el próximo mes de diciembre, mientras que los primeros smartphones equipados con él podrían salir a la luz en febrero, durante el Mobile World Congress 2020 de Barcelona.Vía | Wccftech
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