A día de hoy, los robots de cocina son electrodomésticos válidos para realizar toda clase de funciones tales como picar, cortar, hervir, freír, entre muchas otras. Todas estas funciones, sin embargo, se realizan en un aparato estático desde el punto de vista de la movilidad.
Según apuntan las líneas tecnológicas, en los próximos años comenzaríamos a ver otros robots, más evolucionados, que conseguirían ser autónomos en cuanto a movimiento e interacción. En esta misma línea, cabe decir que las neveras inteligentes, trabajarán coordinadamente con estos aparatos autónomos para poder elaborar las recetas que más se adapten a los alimentos de los que dispongamos.
En cuanto a los clásicos robots de cocina actuales, si bien tendrían un papel importante en los próximos años, su auge duraría hasta la próxima década, cuando se espera que los robots autónomos puedan comenzar a hacer de las suyas en nuestras cocinas.
Todo esto puede sonar a ciencia ficción, pero lo cierto es que si hace treinta años nos contaban que a día de hoy íbamos a poder disponer de aparatos tan sofisticados y prácticos como la Thermomix, lo más seguro es que no le diéramos una gran verosimilitud.