Aún si perteneces a ese 80% que sigue con trabajo, sentirás asfixia cada mes: has de conciliar un sueldo seguramente apretado con una larga lista de gastos: alquileres e hipotecas, colegios, facturas domésticas, gastos en alimentación, ropa, gasolina, cursos, móviles, conexión a Internet y no sé cuántas cosas más.
Imagen de Shutterstock - ©dotschock
Ni que decir tiene que a todo se añade la presión de esa espada de Damocles que supone perder tu trabajo.
Hay que recordar que entramos en esta crisis hace ya casi una década. Ya hace años que se hablaba de esos famosos “brotes verdes”, pero yo no he visto brotar ninguno. Y de la situación política por la que estamos pasando, mejor no hablar.
Seamos realistas: no hay perspectivas de mejora claras, ni a corto, ni a medio plazo. Si sufres asfixia económica, la solución no va a venir de la mano de los políticos, la única persona que puede mejorar tu situación eres tú mismo.
¿Qué encontrarás aquí?
En el mundo online no hay crisis
¿Cuál es la mejor manera de generar ingresos con un blog?
Monetizar con ingresos activos
Monetizar con ingresos pasivos
Por qué el marketing de afiliación es la mejor vía ingresos de pasivos para alguien que empieza
La publicidad online no es apta para bloggers “normales”
Los productos digitales son fantásticos, pero necesitan mucho conocimiento, tiempo y esfuerzo
El marketing de afiliación es el camino del medio ideal
Sin una buena estrategia no conseguirás nada
Conclusiones
Por tanto, la pregunta es: ¿Qué puedes hacer?
Empecemos por lo que hace el 99% (o más…) de la gente y lo que yo personalmente no haría jamás:
Jugar a la lotería esperando que te toque el “gordo”.
Gastarse un pastón en un máster o en encadenar cursos de especialización, uno tras otro, en una profesión sin demanda en el mercado. Incluso un MBA de primera fila (60.000) ya no es una garantía de nada hoy en día.
Ponerte a abrir un bar, un restaurante o una tienda sin ninguna experiencia en el sector e invirtiendo en ello tus últimos recursos: la indemnización de tu despido, tus ahorros o lo que te haya podido prestar tu familia. Una vía directa hacia la ruina definitiva.
Estoy seguro de que conoces casos como éstos de primera mano o que los encontrarás si investigas un poco entre tus amistades y conocidos.
En el mundo online no hay crisis
Ahora la preguntará es:
¿Y cuál es la alternativa?
Antes de concretar mi respuesta, deja que te cuente una pequeña anécdota:
En el año 2013 participé, junto con Carlos Bravo, Alex Navarro y Víctor Martín, en el evento del “Curso para bloggers” sin coste para jóvenes en paro, un evento benéfico en el que asistieron más de 500 personas en cada una de las ediciones que celebramos en Madrid, Barcelona y Murcia.
Alex cerró su intervención con una de esas verdades como puños que ya conoces perfectamente, pero que faltaba que alguien las expresara con las palabras adecuadas:
“En el mundo online no hay crisis”
Ése es el punto de partida para el enfoque que te voy a proponer. Tan simple como eso y, sin embargo, no se puede expresar mejor.
Has de entender tres cosas fundamentales:
La economía tradicional (offline) y la economía online son dos mundos independientes, con relaciones entre sí, pero independientes y con reglas diferentes, que funcionan en paralelo.
La economía offline está en la UVI, olvídate de ella. La economía online, en cambio, está creciendo a toda máquina.
Siendo esto así, no tiene sentido perder el tiempo en un mercado que está muerto. Céntrate en la economía online, allí están las oportunidades.
¿No me crees?
He aquí un simple ejemplo: el comercio electrónico ha crecido a una tasa interanual del 30% en los últimos 5 años, ¡en medio de la mayor crisis en la historia de la democracia en nuestro país!
Pero hay más, basta con un vistazo a nuestras entrevistas BloggerView en el blog para ver casos de pequeños bloggers en todo tipo de sectores que han conseguido generar unos ingresos adicionales o incluso han logrado hacer de su blog su medio de vida.
Como ejemplos te dejo algunas entrevistas de casos recientes, algunos de ellos superan holgadamente los 100.000 al año:
Marcos Vázquez de Fitness Revolucionario
Julio Infante y Carolina Fernández de ECOagricultor.com
Ainara Moreno de JustGo
Y ojo: esta gente no son esos casos excepcionales de YouTubers estrella, tan de moda ahora. No, son gente normal, lectores de Ciudadano 2.0 que hemos entrevistado para dar a conocer su historia e inspirar a nuestros lectores.
Por tanto, creo que la pregunta inicial de si un blog te puede ayudar a llegar a fin de mes queda muy clara: rotundamente sí, y tanto que te puede ayudar.
Veamos entonces a partir de aquí qué hacer concretamente.
¿Cuál es la mejor manera de generar ingresos con un blog?
Te preguntarás: “¿cuál es entonces la mejor manera de generar ingresos con un blog?”
Hay decenas de maneras de monetizar una web o blog, es un campo realmente grande.
Pero para entenderlas mejor, podemos empezar por una división en dos grandes grupos: ingresos activos versus ingresos pasivos, siendo los pasivos especialmente interesantes cuando buscas un complemento a tu sueldo de empleado sin intención de dejar tu trabajo actual.
Monetizar con ingresos activos
Veamos las diferencias:
Cuando hablamos de ingresos activos, estamos hablando de ingresos que tienes que generar a cambio de horas de trabajo. En el momento que no eches esas horas, los ingresos se paran inmediatamente.
Aquí estamos hablando de monetización con la venta de servicios a través de una web (asesoría legal, consultoría, contabilidad/finanzas, coaching, entrenador personal, eventos infantiles, diseño, programación, …) o la venta de productos físicos no automatizada (elaborados artesanalmente, haciendo tú mismo la gestión de stock y logística, etc.).
En particular, los servicios tienen la gran ventaja de ser muy rápidos y sencillos de implementar, basta con una página de presentación sencilla y un simple formulario para que te soliciten los servicios vía web. Por eso, mucha gente empieza por aquí, es fácil y es lo que se hace en el mundo offline.
Pero el gran problema de los ingresos activos, tanto servicios, como productos, es que no escalan. Es decir, la cantidad de horas que puedes intercambiar por dinero tiene un tope porque el día tiene sólo 24 horas y algunas de ellas las necesitas para comer, dormir y estar con la familia.
Pero hay algo aún peor: va a ser complicado conciliar un esquema ingresos puramente activos con el crecimiento de tu blog.
Al principio tendrás tiempo para centrarte en el crecimiento de tu blog porque mientras que no llega audiencia, apenas tendrás que atender a clientes. Pero cuando tu actividad empiece a despegar, el trabajo con tus clientes te consumirá cada vez más horas, horas que no dedicas al blog y en seguir trabajando en el desarrollo de tu proyecto como tal.
Mucha gente se queda atrapada en esta trampa, echando horas como locos para sobrevivir con servicios o productos no demasiado bien pagados porque para eso aún no tienen una marca lo suficientemente fuerte. Pero, por otra parte, no pueden hacer crecer su blog y la fuerza de su marca porque se han quedado sin las horas necesarias para hacerlo.
La pescadilla que se muerde la cola.
Si meditas un poco esta situación, verás que es un error estratégico grave porque supone ahogar tu proyecto cuando aún es un bebé. Mucha gente cae en esta trampa, lo que es también un buen ejemplo de por qué es tan importante formarte antes de ponerte a monetizar tu web.
Monetizar con ingresos pasivos
El peligro de ésta y otras trampas de los ingresos activos es la principal razón por la que a alguien que quiera empezar a emprender en el mundo online le recomendaría siempre buscar una estrategia de monetización basada en ingresos pasivos.
Pero, ¿qué quiere decir exactamente “ingresos pasivos”? ¿Ganar dinero sin trabajar?
Obviamente no.
El blog Fitness Revolucionario de Marcos Vázquez es uno de los ejemplos más espectaculares que hemos llegado a entrevistar en nuestras BloggerViews. En este caso genera ingresos pasivos con una facturación anual de 6 dígitos que en este caso provienen principalmente de la venta de productos digitales.
Para que entiendas bien lo que son los ingresos pasivos basta con darle la vuelta a la definición de ingresos activos: los ingresos pasivos son ingresos que se generan sin intercambiar horas de trabajo por dinero.
Les caracterizan dos cosas:
Típicamente el 80% o más del trabajo se hace antes de ver ni un solo duro.
Una vez que están en marcha, apenas necesitan de tu dedicación, entran en modo “autopiloto”. Podrías irte de vacaciones 3 meses y no afectaría en nada o sólo mínimamente, los ingresos seguirán produciéndose igual todos lo meses.
Suena maravilloso, ¿verdad?
Pues sí y lo es, además, gracias al mundo online están al alcance de cualquier persona con un ordenador y una conexión a Internet.
El mundo offline también existen, pero aquí están sólo al alcance de pocas personas ya que requieren una inversión previa económica, en tiempo y trabajo brutal (un empresario exitoso retirado, propietarios de viviendas alquiladas, etc. se podrían considerar personas con ingresos pasivos).
No obstante, en el mundo online, esto es algo que todo el mundo puede hacer. Además, se puede hacer en cuestión de meses y con una inversión económica casi nula (costes de dominio, hosting, un tema WordPress profesional, algún plugin de pago y poco más).
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Ahora bien, aún más importante que esto, sin duda, es el hecho de que es posible crear un proyecto de ingresos pasivos en tu tiempo libre y desde casa, sin necesidad de dejar tu trabajo actual.
Por tanto, no hay más riesgo que perder tu tiempo si no has elegido bien el nicho de mercado al que te diriges o cometes algún error de otro tipo. No necesitas hacer locuras como dejar tu trabajo actual, simplemente tienes que estar dispuesto a sacrificar una determinada cantidad de tu tiempo libre (según lo rápido que quieras ir).
De hecho, no es casualidad que es así cómo ha nacido Ciudadano 2.0 en el año 2011 y que sus ingresos a día de hoy sigan siendo prácticamente al 100% pasivos, distribuidas en muchas líneas de afiliación diferentes, con una facturación anual de 6 cifras y unos gastos casi nulos.
Por qué el marketing de afiliación es la mejor vía ingresos de pasivos para alguien que empieza
Como ves, cuando empiezas con tu proyecto de blog, tirarte inmediatamente por la vía de los servicios puede matar tu proyecto nada más nacer y, además, no tienes ninguna necesidad de cometer este suicidio gracias a que con un blog se pueden generar ingresos pasivos.
Si empiezas por los ingresos pasivos, podrás desarrollar mucho mejor tu blog y volver a platearte en un futuro el tema servicios de una manera muchísimo atractiva: con una marca personal mucho más consolidada que te permitirá cobrar tarifas más altas y la tranquilidad de un sustento económico pasivo que te va a dar mucha más libertad para decir “no” a los clientes que no te interesen.
Internet y sus tecnologías han dado lugar a una larga lista de posibles fórmulas de ingresos pasivos.
Yo te quiero hablar brevemente de lo que, a mi modo de ver, son las tres más importantes:
La publicidad online.
Productos digitales.
El marketing de afiliación.
Todas son fórmulas que funcionan muy bien en el contexto adecuado. Por tanto, la pregunta que te tienes que hacerte no es cuál es la mejor de ellas, sino ¿cuál es la mejor para mi situación?
Arrojemos un poco de luz a esto:
La publicidad online no es apta para bloggers “normales”
Empecemos por la publicidad online, es decir, Google AdSense y productos similares. Suele ser la primera opción de los bloggers que no tienen ni idea de cómo monetizar (que son casi todos) por lo fácil e inmediato que resulta meter publicidad AdSense en un sitio.
Sin embargo, mi consejo es que inicialmente descartes esta vía.
La razón detrás del consejo es muy simple: AdSense es terreno para profesionales. La remuneración de AdSense en España es simple y llanamente miserable para un blog “normal”. Para que AdSense resulte rentable, necesitas posicionar tus contenidos en nichos muy concretos (y competidos) y generar grandes cantidades de tráfico.
Para que te hagas una idea, en la actualidad, una media de ingresos típicas para muchos blogs “normales” puede moverse en torno en torno a 0,5 por mil páginas vistas.
Es cierto que en los nichos adecuados (finanzas, seguros, etc.) esta cifra se multiplica por N, pero estos nichos están llenos de peces gordos a los cuales es muy difícil arañarles algo de tráfico en Google. Como ya decía antes, entramos en terreno de profesionales.
Nuestro blog, que cuenta con cerca de 300.000 páginas vistas al mes, una cifra bastante alta, generaría unos 150 al mes en AdSense, unos miserables 1800 de facturación al año. Nos daría ni para pagar el menú del día…
Por tanto, ¿por qué te vas a conformar con esta miseria, que es un insulto a tu trabajo, si, con la misma cantidad de tráfico de tu sitio, como verás ahora, con otras vías, puedes multiplicar tus ingresos por 10 y por 100?
Los productos digitales son fantásticos, pero necesitan mucho conocimiento, tiempo y esfuerzo
Los productos digitales (ebooks, cursos online, plantillas de diseño, software, etc.) son seguramente la vía más rentable y estratégicamente más recomendable a largo plazo de todas.
Eso es así porque lo maravilloso de un producto digital es que escala de una manera ideal: tiene básicamente el mismo coste para ti vender una unidad que vender 10.000, no hay ni el coste de los materiales, ni de la logística (almacenaje, entrega al cliente, etc.) de los productos físicos.
Además, un producto digital de calidad que dé en el clavo de lo que demanda tu audiencia lo puedes vender a precios muy atractivos para ti como autor, precios de 3 dígitos típicamente, incluso de 4 digitos en ocasiones. Por eso, en los bloggers que tienen éxito con sus productos, los ingresos se disparan y algunos privilegiados consiguen incluso cifras astronómicas.
Y, muy importante: no dependes de terceros y sus cambiantes condiciones como con la publicidad online o el marketing de afiliación.
Ahora bien, si quieres tener éxito con un producto digital propio, tienes que superar retos complicados para alguien que empieza con un nuevo proyecto de blog:
Necesitas llegar a un umbral mínimo de audiencia y reputación. Hay casos espectaculares que han conseguido esto en menos de un año, pero es un % ínfimo de la blogosfera. No es muy realista extrapolar estos casos.
Tienes que estar seguro de que tu producto tenga demanda real, de que tu audiencia lo va a comprar. Has de averiguar esto antes de ponerte a echar una tonelada de horas en crearlo y para ello necesitas conocer las técnicas necesarias para averiguarlo (para lo cual necesitas, de nuevo un mínimo de tráfico…). Puede que descubras que lo que tú sabes o quieres hacer no tiene una demanda real y que, por tanto, no lo vas a vender.
Tu producto tiene que estar a la altura de los mejores de tu mercado, es lo que tiene Internet, el cliente lo tiene muy fácil para elegir alternativas si son mejores. Para ello necesitas una gran base de conocimiento, tiempo y esfuerzo. Esto puede ser asequible si eres un profesional que lleva su actividad a un blog, pero no si te metes en un tema nuevo para ti.
Como ves, el tema de los productos digitales es, en definitiva, muy potente, pero nada fácil, especialmente cuando no tienes una gran experiencia previa en esto del blogging.
Mi recomendación para alguien que empieza desde cero sería no empezar por ahí, pero tenerlo siempre en el retrovisor para cuando llegue el momento en un futuro.
El marketing de afiliación es el camino del medio ideal
Al empezar a leer los párrafos anteriores, quizás te hayas empezado primero a ilusionar para acabar chafado cuando hablamos de la dificultad de crear productos digitales. Pero espera, aún no todo está perdido, ni mucho menos smile
Hay un camino del medio para aprovechar el gran potencial de los productos digitales, y no solamente de los digitales, y ese sí que es un camino muy asequible para alguien que empieza: el marketing de afiliación.
La idea es muy sencilla: el marketing de afiliación consiste en mencionar y recomendar productos de terceros usando enlaces de afiliado. Estos son enlaces especiales que no llevan simplemente a la página del producto en cuestión, sino que al fabricante del producto le permiten detectar aquellas ventas que han realizado lectores tuyos tras haber hecho clic en tu enlace de afiliado. Es decir, pueden saber si les has llevado un cliente.
Y ojo: no he puesto la palabra “recomendar” en negritas en vano en el párrafo anterior. Acéptame este consejo fundamental sobre cómo hacer un buen marketing de afiliación:
El buen marketing de afiliación no consiste en meter las cosas con calzados, sino en recomendar con ciertas dosis de prudencia y sutileza.
Un afiliado no debería hacer una venta agresiva de productos, sino investigar primero muy bien el mercado, escoger los mejores productos que encuentre entre los afines a los intereses de su audiencia y recomendárselos precisamente por ser los mejores.
Ésta es la manera inteligente y honrada de hacer marketing de afiliación. Será la que más ingresos te genere y con la que conseguirás un win-win para todos: el cliente que está contento con su producto, el proveedor que estará contenido con su venta y tú que estarás contento con tu comisión. Ésa es la vía.
A veces se confunde esto con la publicidad online, pero el marketing de afiliación es algo muy diferente por varios motivos:
En AdSense y similares no tienes el control sobre los productos, no sabes de antemano qué anuncios van a salir. Simplemente “alquilas” un espacio en tu blog y cobras por los clics que se lleva. En el marketing de afiliación tú decides qué productos recomendar y cuáles no. Tienes el control al 100% de todo en todo momento.
El AdSense cobras por los clics en el anuncio, en el marketing de afiliación por cada venta que proceda de un lector de tu blog.
El marketing de afiliación se paga muchísimo mejor que AdSense. En infoproductos como cursos online, es normal recibir comisiones de un 50%, por ejemplo. En productos premium las comisiones pueden ser de varios cientos de euros por una sola venta.
En contra de lo que posiblemente intuyas, con los productos adecuados, la conversión de los enlaces afiliados es mucho mayor que la de los anuncios.
Piénsalo un momento: en realidad, tiene mucho sentido que el marketing de afiliación sea infinitamente superior a la publicidad online para un blogger:
Como pequeño blogger tienes que irte de todos modos a los nichos más especializados para empezar. Los grandes nichos están copados por los peces gordos y no puedes competir en ellos, aún…
Es lógico que una recomendación de un producto muy afín con tu audiencia en un nicho especializado tenga una tasa de conversión muy superior a la publicidad genérica e indiscriminada que te saldrá con AdSense.
Por eso, el marketing de afiliación y los bloggers de nichos especializados son un matrimonio perfecto dónde, como en los buenos matrimonios, ambos disfrutarán de la relación.
Ahora comprenderás también por qué hablaba antes de que se puede dar un factor de 10 o 100 en la diferencia de ingresos entre AdSense y marketing de afiliación: se paga mucho mejor y puedes convertir mucho más, así tus ingresos no suben sólo un poquito, se multiplican de una manera espectacular.
Déjame hablar de una última gran ventaja del marketing de afiliación: puedes empezar a monetizar mucho antes.
Para esto hay tres razones fundamentales:
La sencillez e inmediatez del método: tan sólo con empezar a enlazar las menciones de los productos de los que eres afiliado ya estás poniendo en marcha tus ingresos como afiliado. Y es algo que puedes poner tan rápido en marcha como la publicidad AdSense.
No necesitas una marca personal consolidada para empezar: puedes aprovechar la fuerza de las marcas que recomiendes. Imagínate que eres una bloguera de belleza y aprovechas para enlazar productos de LOréal. Muchas chicas están deseando descubrir nuevos productos, un simple testimonio tuyo que cuente dos o tres cosas interesantes bien contadas sobre un nuevo producto puede ser suficiente para que den el paso a comprárselo.
No necesitas una tonelada de tráfico: esto es así porque en el marketing de afiliación nos vamos a nichos especializados en los que puedes lograr conversiones muy altas si sabes detectar bien las necesidades de tus lectores.
Como puedes ver, el marketing de afiliación es una opción ideal para prácticamente cualquier blogger. Es una manera sencilla, limpia, muy rentable e inmediata de monetizar un blog.
Además, existen productos de todo tipo de los que puedes ser afiliado. Tan sólo como afiliado de Amazon, por ejemplo, ya accedes a un número infinito de productos de todo tipo de nichos.
Por todo esto, la vía de la afiliación es el camino ideal para empezar a monetizar tu blog los primeros años hasta que los veas más claro para crear tus propios productos digitales.
Es más, para cuando llegue ese momento puedes seguir exactamente igual con tu actividad de afiliado, sustituyendo, si acaso, algunos productos que recomiendas como afiliado por los tuyos propios si son equivalentes. Son dos vías perfectamente compatibles.
Sin una buena estrategia no conseguirás nada
Ahora bien, una advertencia: liarte ahora a poner enlaces de afiliado a diestro y siniestro sin más en tu blog no es el camino. Podrás generar “accidentalmente” alguna comisión alguna vez, pero te quedarás muy lejos de un proyecto mínimamente bien monetizado.
Monetizar un blog, sea con marketing de afiliación o con cualquier otra fórmula de monetización, requiere desarrollar una estrategia con los pasos adecuados para tu caso. Sólo así vas a conseguir construir algo que funcione.
Las diferentes fases de esta estrategia se resumen generalmente en un esquema como éste:
Elegir una buena temática, una temática que le importe a la gente.
Crear contenido gratuito de valor para esa temática que atraiga al tipo de lector que te interesa. Aquí un buen enfoque es siempre ofrecer soluciones a esas necesidades y problemas que preocupan a tu audiencia.
Conseguir que a tu web llegue el mayor número posible de visitas de personas que cumplan ese perfil. Aquí estamos hablando de cosas como posicionamiento web o el uso de las redes sociales para difundir tus contenidos.
El valor que aportan tus contenidos gratuitos va a conseguir que esas personas confíen cada vez más en ti. Si consigues darles pequeñas soluciones a sus problemas, la creación de confianza y el hecho de verte a ti como un experto en tu temática es un proceso psicológico natural, casi inevitable podríamos decir. Y en ese proceso es crítico conseguir el mayor número posible de suscriptores de tu lista de correo. A partir de aquí ya no dependes de que te vuelvan a visitar, tú podrás tomar la iniciativa para contactar con ellas cuando desees.
Elegir e implementar las mejores fórmulas de monetización para tu caso.
Como te puedes imaginar, cada uno de estos puntos requiere hilar fino y merece uno o varios posts como éste, pero lo bueno es que son cosas que ya están muy estudiadas, ya se sabe cómo hacer que esto funcione. Además, es algo que todo el mundo puede aprender con una buena formación.
Conclusiones
Permíteme una reflexión final:
La belleza de monetizar un blog con ingresos pasivos, lo que personalmente más me gusta, es que aquí sólo dependes de ti, tus ganas de aprender, tu talento, tus ganas de trabajar y tu foco.
A diferencia del mundo offline y, en especial, de ser un empleado de una empresa, aquí no solamente no hay crisis, sino que tú tienes el control al 100%, es tu negocio, no estás condicionado por terceros.
Si haces las cosas bien, con buen criterio y echando el trabajo necesario, tendrás resultados, te lo garantizo.
Tan solo generar de manera pasiva unos 200 o 300 euros al mes puede ser suficiente para pasar de un mes a mes de asfixia a una situación de tranquilidad.
Pero mi consejo es que no te conformes con este objetivo, es un objetivo modesto y relativamente fácil de alcanzar a medio plazo si sabes cómo hacerlo y echas el trabajo necesario.
Sea cual sea tu preparación, puedes conseguir mucho si trabajas con perseverancia. Descubrirás que monetizar tu blog es solamente es una cuestión de aprender, echar el trabajo necesario (que no es poco, eso sí) y tener algo de paciencia para ser capaz de no pensar sólo a corto plazo, sino a medio y largo plazo.
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