Antes de crear una empresa online

Montar una empresa, tanto en un lugar físico como online, ha de ser una decisión consciente y meditada. Si bien casi todo el mundo está capacitado para tener un pequeño negocio que pueda crecer con el tiempo, lo que lo sacará adelante en buena parte será la actitud.

 Una empresa es una gran responsabilidad que se tiene por uno mismo y por las personas que, de una forma u otra, estarán relacionadas con el negocio. La empresa será lo que dará el sustento, el medio de vida de quien la cree y, si además contrata a trabajadores, tendrá que comprometerse mucho más por ellos y por sus familias, de modo que un negocio no es un capricho y no se crea para probar a ver qué pasa, o no debería ser así.

El primer paso



El primer paso es desear realmente tener un negocio propio. Aunque se cree por una necesidad laboral, como señala Antonio R.Díaz, director del Parque Científico de Madrid en Universia, esa opción debe estar tomada lo más libremente posible y el producto que se va a comercializar debería ser o aproximarse bastante a algo relacionado con los gustos o aficiones del nuevo empresario. De este modo, además de tener una ventaja por conocer el producto, la pasión por seguir adelante superará a los malos momentos que puedan llegar, sobre todo durante el primer año y durante el cual es necesario contar con un asesoramiento completo. Es entonces cuando hay que echar mano de una asesoría fiscal y laboral como Aseido.com, que ofrecen sus servicios y consejos a través de su página web con lo que las ventajas son varias y la rapidez de respuesta a cualquier duda puede ser de gran ayuda.

 Un negocio nunca es estable, no es un sueldo fijo y no tiene horarios ni vacaciones, una empresa requiere mucha atención hasta convertirse en un proyecto sólido y, aun cuando lo sea, el empresario deberá poner su atención en que siga siéndolo.

Plan de negocio y financiación



Algunos emprendedores necesitan financiación, que pedirán a los bancos o recurrirán a las ayudas del gobierno. En el caso de España es posible consultar la información en ipyme.org. Con el fin de conseguir la financiación siempre se le solicitará al nuevo empresario un Plan de Empresa. A través de la página web creada por la Dirección General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa el emprendedor puede ensayar distintos tipos de negocio. Quien quiere emprender un proyecto ha de haber planificado y medido, a nivel personal y material, sus capacidades, las de un posible socio, ha hecho un completo estudio de mercado sobre el producto que quiere vender y sabrá gestionar el dinero con el que cuenta para invertir.

Este escrito, al que podríamos llamar un profundo autoexamen, deben hacerlo todos aquellos que piensen en crear un negocio online o físico, pidan financiación o no. Un proyecto no empieza cuando se da a conocer sino que lo hace en el momento en que surge la idea. Esa idea debe ir creciendo en la persona, ha de crear un sentimiento de ilusión y un convencimiento de que es posible llevarla a cabo. Debe ser una parte de la vida emprendedor, incluso ha de cogerle cariño. De todos esos sentimientos viene la valentía y ese coraje es necesario para cualquier cosa nueva que se emprenda. Se debe olvidar el miedo al fracaso, que no la prudencia, y saber volver a empezar, como explican en infoautonomos.com.

Online y offline

Al iniciar un proyecto de empresa online es necesario planteárselo del mismo modo que si fuese un negocio convencional pero dirigido a personas que pueden estar en cualquier lugar del mundo y a las que nunca se verán por lo que la atención al cliente debe ser rápida y eficaz así como los productos deben ser de la mejor calidad, pues la competencia puede ser a nivel mundial. Así mismo, se debe tener preparada una buena logística; para prepararla se pueden consultar empresas especializadas como Loginser, que ofrecen varios servicios.



Cuando un cliente acude a una empresa online lo hace por comodidad o por no poder encontrar lo que necesita en un lugar cercano a su residencia; en el primer caso espera que la comodidad sea en todos los sentidos, y en el segundo no quiere sentirse defraudado. Hay que tener muy presente que Internet es rápido y global, un cliente mal atendido puede expresarlo en la red en pocos minutos y eso puede hacer zozobrar un negocio.

Teniendo en cuenta estos aspectos es necesario decidir qué tipo de producto le es más fácil comercializar al empresario y con qué garantías cuenta de que va a poder realizar la venta de forma adecuada. Debe conocer los costes de producción, los posibles lugares en los que se puede producir en el caso de que la empresa no lo fabrique y únicamente se dedique a venderlo, ha de calcular un precio que sea razonable sobre otros negocios similares, que cubra los gastos de la empresa y que genere un beneficio.

Conocimiento del producto y target



Un empresario ha de conocer a la perfección el producto que va a comercializar y nunca olvidar las medidas de seguridad que requiere en caso de ser un artículo. Comprar a un proveedor que vende más barato y que no cumple con la seguridad necesaria, además de ser inmoral, puede acarrear serios problemas legales. En Consumoresponde informan sobre las obligaciones de los proveedores. Del mismo modo, se ha de asegurar de que en las fábricas de producción se respeten los derechos de los trabajadores pues si no es así, al saber el origen de los productos, algo que es obligatorio informar, y si se descubre cualquier tipo de explotación asociada al producto, la imagen del negocio puede verse seriamente afectada.

Cualquier producto o servicio que se comercialice y que no cumpla totalmente con la legalidad, del país en el que se encuentre la empresa o de otros en los que realice ventas, puede convertir el sueño de un negocio en una auténtica pesadilla.

Asimismo, el empresario debe plantearse a qué público va dirigido el producto y ha de ser consciente de que, en el caso de ser haber elegido un producto afín a sus gustos sus clientes no tienen por qué tener las mismas necesidades ni han de pensar igual que el empresario de modo que deberá encontrar la forma de llegar a ellos, darles un motivo por el cual necesitan ese producto en concreto y abrir su mente para comprender a una gran diversidad de personas con caracteres y costumbres totalmente distintas entre sí. El blog de Sage nos explica cómo conseguirlo.

El feedback de los clientes



El empresario ha de actuar utilizando la psicología, no es suficiente con anunciar una empresa y explicar qué es lo que ofrece, también ha de estar dispuesto a escuchar y aprender de cada una de las personas que se interesen en su negocio, sean compradores o no. Como en una tienda física, cualquier transeúnte que mire, aunque sea de reojo, el escaparate, puede convertirse en un futuro cliente de modo que es necesario atraer su atención de alguna manera y una de esas formas es hacerle saber que el dueño del establecimiento está dispuesto a escuchar sus sugerencias y a ayudarle a encontrar lo que necesita en la medida que le sea posible.

En ocasiones el empresario habrá de estar dotado de una gran paciencia o esforzarse por estarlo; nunca ha de olvidar su objetivo ni por supuesto tampoco su buena educación pues es sabido que a través de Internet podrá recibir comentarios y sugerencias de todo tipo por parte de personas que es posible que difícilmente sepa alguna vez quienes son. La resiliencia y el sentido del humor son  buenos aliados para no permitir que desconocidos hieran psicológicamente a alguien que está emprendiendo un proyecto. Es necesario saber identificar qué mensajes dirigidos al negocio o sus propietarios pueden ser realmente importantes como para dañarle y, aunque nunca hay que subestimarlos, lo más efectivo es centrarse en las críticas constructivas y en la satisfacción de los clientes. Empresas como Optimitzat aconsejan a los empresarios en esta parte del camino.

Identidad de marca / branding



Todo negocio ha de tener un nombre, una marca, y su elección es de suma importancia. Los especialistas en marcar, como Nombra, pueden ayudar al empresario a tomar una decisión. Un nombre difícil de recordar puede perderse entre el enorme mar que es Internet y una marca que no llama la atención simplemente no atrae a los clientes y no destaca sobre el resto de empresas. En una o dos palabras, el nombre de un negocio ha de explicar claramente qué producto comercializa y dar una imagen de positivismo y confianza.

Es importante tener en cuenta el significado de ese nombre en otros países y cómo puede ser aceptado en otras culturas e incluso en la propia pues, aunque se elija con sentido del humor no todo el mundo comparte según qué gustos. El nombre de una empresa que pretende consolidarse y expandirse, algo que en principio desean casi todos los empresarios, puede definir con cierta simpatía y amabilidad un servicio pero también ha de dejar claro que ese negocio es una empresa seria. Por otra parte, es muy necesario asegurarse de que ningún otro negocio utiliza el mismo nombre y se ha de registrar en la oficina de marcas y patentes antes de darlo a conocer.

Análisis de la competencia



Para una empresa online el análisis de la competencia y el estudio de mercado han de ser exhaustivos. No es suficiente con utilizar un buscador de Internet y consultar cuántas empresas hay en su localidad o en su país ofreciendo los mismos productos. El futuro empresario deberá saber cuántas hay en otros países y qué facilidades de envío ofrecen al extranjero porque si bien puede resultar más barato para un cliente comprar en el país en el que reside también puede ocurrir que otra empresa le ofrezca un producto de mejor calidad o un modelo exclusivo de ese negocio que desee tener. El empresario ha de tener en cuenta que no a todo el mundo le importa pagar un poco más por conseguir lo que quiere o necesita. En la Asociación Nacional de Empresas de Investigación de Mercados y Opinión Pública se pueden consultar a empresas especializadas.

El propietario de un negocio online ha de saber observar y estar siempre dispuesto a negociar pues la competencia en ocasiones puede convertirse en un aliado para ambas partes. Dos empresarios de países distintos pueden llegar al acuerdo de hacer de intermediarios entre los clientes de ambos proporcionándole uno lo que no puede el otro y viceversa. Si bien todos los empresarios han de saber cómo negociar, en el caso de un negocio online también se ha de conocer el idioma y las costumbres de otros países para comprender cómo se dirigen a sus clientes las otras empresas y qué les ofrecen según sus preferencias; de este modo la venta o la alianza podrá ser posible.

Marketing



Toda empresa ha de darse a conocer y, aunque se trate de un negocio online, no es suficiente con comprar un dominio web en el que figure el nombre de la empresa. Se ha de realizar una inversión en publicidad que puede ser a través de televisión, radio, repartiendo folletos, publicidad en buscadores (como adwords de Google), banners en páginas web, participación activa en las redes sociales en representación de la empresa a través de las cuales se pueden organizar concursos, ofrecer descuentos e invitar a los consumidores a dar su opinión. Además, la página web de la empresa debe posicionarse en los buscadores por lo que ha de ofrecer a los visitantes contenidos interesantes, descripciones de productos lo más detalladas posibles, facilitar la consulta rápidamente y que sea accesible para todas las personas. En la empresa Interdigital son verdaderos expertos en todas las materias relacionadas con el mundo del desarrollo web y marketing online.

Traducir la web a varios idiomas hará que los internautas de otros países se interesen por los productos ofertados. Si al inicio del negocio no se cuenta con dinero suficiente para contratar las variadas formas de publicidad, el empresario deberá al menos contar con un pequeño equipo de marketing o con conocimientos para llevarlo a cabo él mismo.

En todo caso un emprendedor debe formarse continuamente sobre sus productos y sobre las técnicas de venta y publicidad necesarias.