Si usted ha desarrollado un sitio, posiblemente se haya encontrado resolviendo los inconvenientes equivocados múltiples veces. Probablemente se le haya pedido que agregue una característica inútil, o bien, que simplemente haya pasado demasiado tiempo en una comisión que resultó más bastante difícil de incorporar que esencial para el final del proyecto.
En el presente artículo intentaremos comprender qué dinámicas nos distraen de los problemas reales de nuestro proyecto y dañan la experiencia de nuestros usuarios. Analizaremos por qué razón suceden estas cosas y encontraremos formas específicas de evitarlas.
1. Enfoca bien hacia quién diriges tu web
Un inconveniente común surge cuando se le anima a impresionar al cliente del servicio, gerente o jurado en un concurso en lugar del usuario final real de nuestros sitios. El resultado es a menudo un sitio que maravilla al usuario pero confunde a los usuarios. Un síntoma común de este problema es la presencia de efectos visuales complejos que impiden al visitante hallar lo que busca.
Este problema puede suceder por razones diferentes: presión, ideas contradictorias o bien falta de comunicación interna.
La solución es sostener el enfoque en el usuario. Así sea que esté creando un sitio o bien pagando por él, siempre y en todo momento y en toda circunstancia debe preguntarse de qué forma las resoluciones tomadas durante la fase de diseño afectarán la experiencia del usuario. ¿Pueden los visitantes encontrar lo que buscan? ¿Los cambios que hemos sugerido le complican la navegación?
Si todavía tienes adversidades para admitir a un cliente bastante difícil, muéstrale las consecuencias de tus resoluciones. Por ejemplo: "Si borramos este fichero grande, la página se va a cargar más veloz. Esto va a aumentar el número de usuarios que seguirán en esta página y las ganancias pueden acrecentar en un X por ciento.
No te preguntes "¿por qué razón?
A veces, los diseñadores se encuentran con un trabajo que lleva un buen tiempo y que hay que desarrollar cuando la mejor solución puede ser la más simple.
Por servirnos de un ejemplo, imagine a un usuario pidiéndole que introduzca un campo de búsqueda en su sitio. No es difícil entrar de manera inmediata en las especificaciones de esta petición. ¿Dónde podemos ponerlo? ¿En qué instante se debe desarrollar? ¿De qué forma debe verse la página de resultados? ¿De qué forma se estructura la URL?
El interrogante que raras veces aflora es: ¿Por qué?
En esta hipotética historia, el usuario no precisa esta característica. No es un enorme minorista pero los usuarios no pueden localizar lo que intentan. Unos simples cambios en la navegación podrían solucionar el inconveniente, pero en su sitio, la compañía decide entrar en un campo de busca que no despeja las dudas de sus clientes finales.
¿De qué forma podemos eludir este inconveniente?
La mejor forma es proceder con una serie de preguntas para identificar el inconveniente en lugar de centrarse en una solución. Por servirnos de un ejemplo, en lugar de sumergirse en el diseño, pregunte por qué fue necesario añadir esta característica. Siguiendo preguntando "por qué" vas a poder entender el origen del inconveniente, que probablemente va a ser "Nuestros clientes del servicio no pueden hallar lo que intentan".
Al centrarse en los problemas y objetivos reales, hallará soluciones más asequibles, más cortas y considerablemente más eficientes.
Consume tiempo en lo necesario
Si estuvo implicado en el diseño de un sitio, posiblemente haya pasado más tiempo del preciso para llenar detalles innecesarios. Las labores difíciles pueden tomar tiempo, pero la dificultad no siempre y en todo momento es un síntoma de relevancia.
Por servirnos de un ejemplo, he pasado bastante tiempo animando un fondo que no resultó ser muy importante. Por suerte, en una reunión pudimos descubrir que la resolución había sido tomada en el último momento por un empleado que deseaba ver "esa cosa extra". Cuando se hizo evidente que la adición no ayudaría al usuario final del lugar, la animación se suprimió de la lista de prioridades.
¿De qué forma podemos evitar pasar demasiado tiempo en tareas sin relevancia?
Ya antes de empezar a trabajar en un lugar, asegúrese de comprender cuáles son los objetivos más esenciales. Este tipo de conciencia puede eludir perder el camino a lo largo del diseño.
Si pasa demasiado tiempo completando una labor innecesaria, dé un paso atrás y vuelva a evaluar las prioridades. ¿Precisa la compañía esta funcionalidad? ¿Es una función útil? ¿Existen atajos mediante los que podamos lograr el mismo efecto? Preguntas como estas pueden asistirle a ahorrar un buen tiempo.
Busca la información adecuada
En su posición como diseñador web o diseñador, posiblemente no haya sido informado de las razones detrás de ciertas decisiones. En su posición como cliente del servicio o gerente, probablemente no haya visto todas y cada una de las opciones técnicas y la información que precisa para valorar el panorama completo. La falta de información puede suponer una pérdida de tiempo, dinero y atención por la una parte del usuario.
Una forma de solucionar este inconveniente es ser directo (edificante) cuando nota un inconveniente.
Por poner un ejemplo, si una resolución puede empeorar la experiencia del usuario de manera que impida a los usuarios comprar un producto, tiene el deber de darlo a conocer. Habitualmente encontrará que sus empleados estaban demasiado ocupados con otras labores para percatarse del inconveniente. Si es usuario o gerente, es una buena práctica informar a su equipo de las razones detrás de sus decisiones, a fin de que todos puedan generar mejores soluciones.
Dejar que la información se mueva
Hay un juego para niños llamado teléfono inalámbrico. Una oración se murmura al oído del vecino y se transmite mediante una fila de personas para preservar su contenido. Al final del juego el mensaje es drásticamente diferente.
Este escenario puede parecer divertido en un juego, pero en un contexto profesional es un problema grave. Muy frecuentemente una gran idea es filtrada a través de diferentes niveles de equívocos hasta el punto de que la versión final es bastante absurda.
Permítanme ser claro, no afirmo que cambiar de parecer sea malo. Mas es serio cuando las ideas cambian basadas en equívocos. Aquí hay algunos consejos:
Simplifique el mensaje tanto como pueda. Centrarse en su contenido real y suprimir cualquier detalle extraño al proyecto.
Cuando sea preciso, comparta una idea de forma directa con las personas que necesitan escucharla. No estropees tu oficina con cada idea que te venga a la mente, mas ni siquiera se lo menciones a tu vecino aguardando que la conveniente llegue de alguna forma al receptor.
Escriba su idea. De este modo vas a tener más tiempo para pensarlo y va a haber una referencia para cualquiera que haya de estar implicado.
Hay múltiples razones por las que un diseñador podría pasar tiempo en los inconvenientes equivocados. Los consejos de este artículo no resolverán todos los inconvenientes, mas espero que le den una base estable para tratar sus proyectos. Siempre que concentre su atención en el usuario, evitará distraerse con soluciones ilusorias y tendrá la ocasión de solucionar los problemas correctos.