ENTENDIENDO LA EXPOSICIÓN
En este primer post dedicado al modo manual de nuestra cámara hablamos de la exposición. Seguro que ya os habéis enfrentado más de una vez a esas fotos “quemadas” o “muy oscuras”, pues la solución está en la EXPOSICIÓN. Se define como la cantidad de luz que llega a nuestra cámara, la cual se puede controlar usando el modo manual.
Todo es cuestión de la iluminación en la escena (factor externo) y de la cantidad de luz que recibe el sensor de nuestra cámara (o la película, para los nostálgicos de la fotografía analógica) (factor interno). ¡Pero qué no cunda el pánico! En este post os ofrezco algunas de las claves para ajustar correctamente la exposición utilizando la cámara en modo manual y aprenderemos como funcionan los principales parámetros: ISO, Apertura y Tiempo de Exposición.
¿Cómo sabemos la cantidad de luz que está recibiendo la cámara en cada momento?
La mayoría de cámaras digitales, tanto réflex como compactas, incluyen un diagrama llamado exposímetro al pie de la pantalla como el que os muestro abajo. Esta escala nos ayuda a saber si el sensor de la cámara está recibiendo mucha (valores positivos) o poca luz (valores negativos). Un buen punto de partida es conseguir que nuestra fotografía tenga un valor de exposición 0.
Coge tu cámara, enciéndela, ponla en modo manual y haz el siguiente experimento.
Fija los siguientes parámetros:
ISO: 400
Apertura: 4.0
Tiempo: 1/80
Ejercicio 1:
Apunta con tu cámara a una zona oscura de la habitación, aprieta el disparador a la mitad y mira la exposición en el gráfico. Probablemente sea algo parecido a esto:
Significa que la fotografía esta subexpuesta, es decir, no recibe suficiente luz y saldrá una foto demasiado oscura.
Ejercicio 2:
Ahora, haz la misma operación pero apuntando a una zona con mucha luz, una ventana por ejemplo. Obtendrás un gráfico cercano a este:
Esto significa nuestra foto va a salir sobreexpuesta, es decir, el sensor esta recibiendo demasiada luz y la fotografía estará quemada.
Habrás visto como responde el gráfico a los cambios de luz. Como vemos la luz que recibe nuestra cámara depende principalmente de la luz que hay en la escena que queremos fotografiar. Ambos valores están muy alejados del cero y la exposición de nuestra foto no sería correcta.
Lo mismo ocurre en las fotos de comida. Os dejo un ejemplo práctico sobre cómo afecta la Exposición a las fotos de comida:
Ejemplo 1: Judías Verdes Salteadas con Ajo
¿A qué la foto de la izquierda os parece demasiado oscura?, ¿a qué la foto de la derecha es demasiado brillante? Como resultado nos quedamos con la fotografía que se ha tomado con una exposición 0 o neutra.
Ejemplo 2: Crema de Calabaza al Curry
Pero, ¡ojo! la exposición neutra no siempre es la que más favorece a nuestro plato como podéis ver en esta crema. ¿Qué foto os gusta más? Yo me quedo con la foto de la derecha (exposición +1), aunque teóricamente está sobreexpuesta, pero al estar compuesta en gran parte por colores blancos queda mejor si está un pelín quemada. A medida que os familiaricéis con el control de la exposición veréis que hay escenarios que quedan mejor con ciertos valores de exposición.
¿CÓMO PODEMOS VARIAR LA CANTIDAD DE LUZ QUE RECIBE NUESTRA CÁMARA?
La solución más evidente es iluminar más o menos la escena. Desafortunadamente al trabajar con luz natural esto no va a ser siempre posible. Sin embargo, con nuestras cámaras podemos variar 3 parámetros que van a controlar la cantidad de luz que llega hasta nuestro sensor, que son: ISO o sensibilidad, la Apertura (f) y el Tiempo de Exposición.
Si nos fijamos en el gráfico de arriba veremos que también nos muestra el valor de estos 3 parámetros que estamos utilizando en cada foto. La idea es variar estos tres parámetros hasta ajustar la exposición a los valores correctos, osea exposición neutra o cero.
EXPOSICIÓN NEUTRA (cero) = LUZ AMBIENTAL + ISO + APERTURA + TIEMPO DE EXPOSICIÓN
Mi truco es pensar en la exposición como la suma de esos 3 parámetros, a parte de la luz ambiental, entonces id ajustando esos parámetros hasta conseguir una exposición neutra (valor 0):
La ISO, la apertura y el tiempo de exposición también influyen en otros aspectos de las fotos como el enfoque o la calidad de la imagen pero de esto y mucho más hablaremos en los próximos post donde analizaremos cada uno de ellos por separado. ¡No os los perdáis! Demos un pequeño vistazo a que representan cada uno de estos parámetros.
¿QUÉ NECESITAS SABER SOBRE LA ISO, LA APERTURA Y EL TIEMPO DE EXPOSICIÓN?
1. El valor ISO se corresponde con la sensibilidad del sensor de la cámara. En general, a mejor cámara mejor sensor y en consecuencia ofrece valores ISO más altos que te permiten hacer fotos en situaciones con poca luz. Un valor ISO alto produce una foto más luminosa (ISO=800) forzando el sensor a captar más luz. En consecuencia, dependiendo de la calidad de la cámara se puede producir pérdida de la calidad en la foto y aparece lo que llamamos ruido (foto a la derecha). Por esta razón se aconseja utilizar valores ISO por debajo de 800 siempre que las condiciones de luz lo permitan.
Ejemplo: Un valor de ISO muy alto (foto de la derecha) produce una perdida de calidad notable apareciendo una textura granulada.
2. La apertura controla el diámetro del obturador lo que significa que cuanto más abierto (¡ojo!, valores f menores como f/2.8) mayor cantidad de luz recibe el sensor y por tanto la exposición aumentará. Pero la apertura también controla la cantidad de enfoque de los elementos que aparecen en la foto. Un valor f pequeño (f/2.8) se corresponde con un obturador muy abierto y eso produce que el área que aparece enfocada en la foto sea pequeña, mientras que el resto de elementos aparecen desenfocados o borrosos. Este efecto de enfoque y desenfoque es muy utilizado en fotografía culinaria para llevar la atención del espectador hacia el elemento enfocado.
Ejemplo: Granola con mantequilla de Cacahuete – Esta foto tienen se tomo con un valor f/3.2 y ha producido que solo la zona del bol este enfocada y nítida. De esta manera la bandeja del fondo no nos distrae y fijamos nuestra atención en el bol de granola.
3. El Tiempo de exposición o la Velocidad de Obturación indican el tiempo que el sensor permanece abierto recibiendo luz. A mayor tiempo mayor cantidad de luz. Aunque lo llamemos “velocidad” la cámara nos indica el tiempo que el obturador permanece abierto expresado en segundos o fracciones de segundo (1/80). El tiempo de exposición también permite congelar o no los elementos en movimiento en la foto. Si utilizas una velocidad de obturación rápida (es decir, tiempo de exposición corto) el movimiento se congela. Al contrario, si tomamos una foto con una velocidad de obturación lenta (tiempo largo) captaremos el movimiento producido por los objetos en la foto (como en la foto de abajo)
Ejemplo: Foto tomada con una velocidad lenta (1/40) en la que se captura el movimiento de la vinagreta. Este recurso se utiliza mucho en fotografía culinaria.
EN RESUMEN…
Si habéis llegado hasta aquí, muchas gracias por vuestra atención. Se que este post ha sido más largo de lo normal y además tiene muchos conceptos que digerir. Si tenéis alguna pregunta no dudéis en dejarme un comentario debajo. Me encanta ayudaros para que saquéis la mejor foto a vuestro plato.
Un buen punto de partida es saber que:
Si aumentas la ISO aumenta la exposición
Si disminuyes el valor f (apertura) aumenta la exposición
Si aumentas el tiempo de exposición aumenta la exposición
Pásate al modo manual hoy mismo y ya verás como mejoran tus fotos. Espero vuestros comentarios y compartid el post si os ha gustado. Muchas gracias y un abrazo.
¿Y ahora por dónde sigo? Pues tienes toda una sección sobre fotografía culinaria en el blog llamada FOTO RECURSOS. Estos son algunos de los artículos más importantes que te ayudaran con tus fotos:
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