El arte de saber esperar. El autocontrol necesario para gestionar correctamente una espera. Para controlar el impulso nato de salir corriendo, llegar antes, exigir más rápido y quererlo todo primero. Este impulso que la sociedad actual acepta, considera normal. Algo corriente y hasta positivo, en ocasiones.Haz clic aquí para editar.
Al final, todo irá bien
Y debería ser al contrario: En lugar de dejarnos llevar, de no ser capaces de controlar nuestra mente, tendríamos que ser capaces de gestionar correctamente esta y todas nuestras emociones. Y ello involucra el saber esperar, saber que todo llegará.
Tener la certeza de que al final todo se completará, al final todo irá bien. Y si no, es que todavía no es el final. Todavía se puede trabajar más, avanzar más y hacer más por alcanzar la meta.
Es como pintar una alfombra de bambú vieja
Poco a poco, barrita a barrita. Si miras la alfombra de bambú entera de 3 x 3 metros cuando acabas de empezar, lo habitual será pensar en todo lo que queda todavía. Quizás calcules el tiempo que te llevará si tardas tres minutos en pintar cada una de las varillas, y la alfombra tiene x en total.
Y debería ser al revés: no estás pintando la alfombra entera. Estás pintando la varilla en la que estás ahora. Y tienes que hacer el mejor trabajo posible con esta varilla. Poner todo tu esfuerzo y toda tu mente en pintar esta varilla de bambú, no en pintar la alfombra.
Y si eres paciente, si sabes gestionar tus emociones y tus energías correctamente, habrás pintado todas las varillas: Convirtiéndose en un todo, habrás completado la tarea. Así es cómo se pinta una alfombra de bambú. Así es como deberíamos gestionar nuestra vida: centrándonos en la tarea actual, no queriendo correr a la siguiente.
Al final, la tarea actual queda a medias por llegar a la siguiente, que también quedará a medias. Así son las cosas ahora.