Se carga en 2 minutos y tiene una vida de hasta 20 años, algo impensable hasta ahora para una batería pero que es posible que podamos encontrar dentro de poco en nuestros teléfonos si el trabajo de un grupo de investigadores de la NTU de Singapur sale finalmente adelante.
Los técnicos están trabajando en una batería de gel de dióxido de Titanio que se puede recargar un 70 por ciento en dos minutos y que puede elevar los ciclos de carga hasta 10 veces en comparación con las baterías actuales, desarrolladas a partir de iones de Litio.
Al parecer han encontrado el modo de convertir el dióxido de Titanio en nanotubos que aceleran las reacciones químicas y permiten que la capacidad de la carga se acelere a los niveles que se consiguen.
En busca de financiación
Los investigadores están en pleno proceso de búsqueda de apoyo financiero para crear nuevos prototipos. Si todo sale como se espera, en dos años podríamos ver los primeros teléfonos móviles con una batería capaz de cargarse en muy poco tiempo y con una gran vida útil.