Aunque quieras imprimir tu foto expresamente en blanco y negro, es mejor dispararla en color y después convertirla a monocromo desde tu software de edición favorito (p.e. Photoshop); ésto te permitirá mucho más control sobre el resultado que tu cámara. Si finalmente decides disparar directamente en blanco y negro, te sugerimos que utilices filtros para tus objetivos: un filtro rojo, naranja o amarillo pueden mejorar drásticamente un cielo aburrido, mientras que el filtro naranja reducirá la aparición de pecas y manchas en tus retratos.
30. Utiliza los preajustes de tu cámara para el balance de blancos
Debido a que es procesado directamente por la cámara, querrás obtener el tono de color adecuado para tus JPEG durante la captura de tu instantánea, de modo que te aconsejamos que utilices los preajustes de balance de blancos que incorpora de fábrica tu cámara (luz de dia, tungsteno, sombra, etc.) en lugar de confiar en la opción automática. A pesar de que, como te decimos, el balance automático de blancos no es recomendable (por básico) en capturas directas a JPEG, ésto no es aplicable cuando estés disparando en formato RAW ya que, en este caso, puedes fijar el balance de blancos más tarde cuando proceses ("reveles") la imagen desde Photoshop.