Creo que mi solución hubiera sido ir con una cargo bike. Con todos los amiguitos dentro! Por lo menos no hubiera sido la única con el brazo partido y si nos caemos, nos reímos todos, no sólo unos cuantos… ehem…
En Copenhague, que por lo visto es mucho más plano que aquí aunque el suelo resbala como una mala cosa, existe el barrio libre de Christiania. Ellos lo llaman Fristaden Christiania (Ciudad Libre de Christiania).
A principios de los años 70 un grupo de padres decidió derribar un muro de un terreno militar abandonado del centro de la ciudad para tener un parque donde pudieran jugar sus niños. En lugar de quedarse ahí la cosa, los vecinos decidieron organizarse y finalmente se forma una comunidad autogobernada, asamblearia e independiente de la ciudad, que tiene sus más y sus menos con el gobierno, pero que permanece activa hasta hoy. Actualmente viven unas 800 personas, y es uno de los barrios más turísticos de la ciudad.
En este barrio nacen las Christiania Bikes, bicis usadas para transportar, repartir, o pasear a la familia! Aquí podéis ver a los fundadores explicando cómo surgió la idea y la empresa:
Por cierto, si estáis interesados en una Christiania, no hace falta que vayáis hasta Copenhague a por una, en España hay distribuido oficial, de donde saqué las imágenes de la cabecera.
Yo por el momento voy soñando con pasearme por el Retiro con mis peludos en la cestona de una cargo bike… No será lo mismo que ir en bici por una ciudad danesa -Copenhague fue nombrada el año pasado Mejor ciudad para los ciclistas y Ciudad con mayor calidad de vida del mundo, igualito que Madrid…- pero seguro que sería divertido.
¿Habéis estado en Christiania? ¿Cargáis a vuestros peludos en las cestas de las bicis? Os espero en los comentarios!
Fuente: este post proviene de Lilu and Me, donde puedes consultar el contenido original.
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