Nota : Este no es un artículo de «Cómo codificar Ruby», sólo trata sobre el uso de RVM para gestionar sus instalaciones de Ruby.
Cómo funciona
La configuración de RVM más común es algo así: un usuario instala RVM como una aplicación, ya sea en todo el sistema o en su casa. A través de RVM, las versiones de Ruby elegidas por el usuario se instalan automáticamente en su casa. Mediante los comandos RVM, el usuario especifica qué versión desea tener activa en cada momento. Todas las llamadas hechas a Ruby durante ese tiempo se enrutan al ejecutable de Ruby apropiado y se ejecutan normalmente. No hay virtualización ni complejas envolturas o chroots de los que preocuparse, actúa más o menos como una ingeniosa serie de enlaces simbólicos y variables de entorno que dirigen todas las llamadas de Ruby a la versión elegida.
Instalación
Primero necesitamos algunos requisitos previos. Su instalación estándar de Ubuntu debería contener mucho de lo que se necesita, pero es posible que falten algunos de los paquetes necesarios. Para construir RVM correctamente, instale los siguientes paquetes desde el Centro de software de Ubuntu o desde la línea de comandos con:
sudo apt-get install git build-essential bison openssl libreadline6 libreadline6-dev curl git-core zlib1g zlib1g zlib1g-dev libssl-dev libyaml-dev libsqlite3-0 libsqlite3-dev sqlite3 libxml2-dev libxslt-dev autoconf libc6-dev>.
Esto prepara nuestro sistema para construir e instalar correctamente RVM y Ruby. No necesitaremos hacer la rutina habitual de configuración/hacer en este caso ya que RVM realmente incluye un sencillo script de compilación que debería hacer el trabajo por usted. Una vez que todas las dependencias anteriores estén instaladas, ejecute lo siguiente desde la línea de comandos:
Esto obtendrá la fuente y entregará un buen mensaje del desarrollador de RVM.
Agregar una versión de Ruby
En este punto tienes RVM pero no hay ninguna instalación de Ruby que se pueda usar para ejecutarlo. Conseguir que RVM instale una es tan simple como un simple comando del shell. Para el primer ejemplo, instalaremos la versión 1.8.7 estable desde el código fuente con un comando RVM:
rvm install 1.8.7
RVM se encargará de todo el proceso, incluyendo la configuración, compilación e instalación de RubyGems.
Después de la instalación
Una vez completado, hay un poco de configuración del entorno que tenemos que hacer. Para que RVM pueda interceptar correctamente las llamadas Ruby, tenemos que añadir la siguiente línea a .bashrc o .bash_profile :
[[ -s "$HOME/.rvm/scripts/rvm" ]] & &. "$HOME/.rvm/scripts/rvm"
Reinicie su shell y debería tener efecto. Para probar, simplemente ingrese
tipo rvm | cabeza -1
Que debería responder con «rvm es una función» . Si no, hay algo roto en la línea.
Administración de las versiones de Ruby
Ahora que todo está configurado, ¡podemos usar la RVM! Asumiendo que ha instalado la versión 1.8.7 como en el ejemplo anterior, se puede seleccionar con
rvm use 1.8.7
>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>.
RVM debe darle una respuesta confirmando su elección y mostrándole la ubicación del ejecutable de Ruby. Esto puede verificarse más tarde utilizando el sistema estándar que manda.
Las versiones adicionales pueden ser instaladas de la misma manera, y las gemas pueden ser agregadas y removidas de las versiones RVM exactamente como lo harían en un sistema normal de instalación de Ruby. Puede elegir su versión sobre la marcha para asegurarse de que su aplicación funciona correctamente sin preocuparse por los conflictos y los desajustes del entorno. Disfrute!
Fuente: este post proviene de Vida Tecno, donde puedes consultar el contenido original.
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