Según el informa que corre por la red, la compañía surcoreana tendría que sustituir o reparar nada menos que 2.5 millones de unidades del Samsung Galaxy Note 7 que se han distribuido hasta el momento en todo el mundo desde hace aproximadamente dos semanas. Unas cantidades realmente enormes, teniendo en cuenta que los problemas reales solamente se han encontrado hasta el momento en 35 unidades del último phablet que ha lanzado la compañía.
Samsung Galaxy Note 7 o mantener la reputación
Muchas voces ya están señalando que este movimiento por parte de Samsung, con un coste aproximado de unos mil millones de dólares, puede ser un poco exagerado, aunque teniendo en cuenta que las baterías explican y se incendian, es también una cuestión de seguido. Y como no, también de prestigio de una de las compañías, por no decir la primera, en el sector de la telefonía móvil.
En cualquier caso, y viendo los movimientos de la competencia más directa, sobre todo por parte de Apple, está claro que estos problemas con el Samsung Galaxy Note 7 no podrían haber llegado a la compañía en peor momento. Estamos hablando además de unas perdidas de llevarse a cabo este cambio de unidades dañadas, de nada menos que un 5% del total de lo que Samsung podría ingresar este año 2016. Todo un golpe a las arcas y los inversores de la compañía que no sabemos en que podría acabar.
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